El Sevilla Femenino sacó un valioso un punto ante la UDG Tenerife (2-2), igualando un 0-2. Las entrenadas por Cristian Toro fueron de menos a más, aunque incluso con el marcador en contra no fue nada inferior al conjunto insular, que llegó pocas veces al área local.

En el primer tiempo, el equipo sevillista salió bien, pero las tinerfeñas se fueron metiendo poco a poco en el partido. Tanto es así que antes de la media hora de partido Blom aprovechó un error a balón parado para adelantar a las visitantes. Con el Sevilla intentando recomponerse, una falta favorable a las visitantes a diez para el final la aprovechó Andrea Marrero para batir a la hoy capitana Esther Sullastres con un testarazo. Y cuando todo estaba más cuesta arriba, apareció Martín-Prieto en el alargue del primer acto para, tras imponerse en carrera, batir a la ex sevillista Noelia Ramos y recortar diferencias.

En el segundo tiempo, el equipo de Toro apretó, los cambios funcionaron y buscó el empate con alguna llegada de la goleadora sevillana y con insistencia por las bandas mientras el equipo de José Ángel Herrera jugó un poco con el resultado y buscaba defenderlo agazapado atrás. El equipo sevillista encontró su premio en el minuto 90, cuando Inma Gabarro aprovechó una imprecisión en la zaga insular para hacer la igualada. Pero quedaban emociones fuertes en la prolongación, cuando la árbitra decretó penalti a favor del Granadilla. Nicoli y Otermín fueron expulsadas, pero Sullastres dejó todo en orden parando el lanzamiento de Pisco.

Con este empate, aunque el equipo nervionense buscó la victoria hasta el final, se recuperan sensaciones y confianza de cara al próximo encuentro, que será ante el Deportivo Alavés Gloriosas a domicilio.