Una polémica acción de VAR dejó sin victoria a un Sevilla de menos a más ante el Mallorca (1-1). Los de Lopetegui regalaron los primeros 70 minutos a un conjunto bermellón que perdonó varias ocasiones claras y que se adelantó por medio de Antonio Sánchez. Un golazo de Lamela devolvió el equilibrio al marcador. En el 94 Ocampos logró marcar a puerta vacía a pase de Fernando, pero el colegiado consideró que el brasileño se había ayudado del brazo y el tanto finalmente no subió al marcador. 

El Mallorca consiguió adelantarse en el marcador en su primer disparo entre los tres palos. El artífice fue Antonio Sánchez, que se estrenó como goleador en Primera gracias a un rechace a centro de Amath Ndiaye. Justo premio al buen arranque de los locales, más enchufados que los sevillistas.

La presión de los de Luis García Plaza asfixiaba al conjunto de Lopetegui, que aún así tuvo el empate con una vaselina de Rafa Mir ante la salida en falso del meta Manolo Reina que se marchó fuera por poco. Fue uno de los pocos acercamientos de un Sevilla totalmente superado en el Visit Mallorca Estadi.

Antes del descanso pudo ser peor para los de Lopetegui, pero primero Bono detuvo un peligroso lanzamiento de falta de Dani Rodríguez y posteriormente fue Ángel el que no estuvo fino a la hora de rematar en inmejorable posición.

El paso por vestuarios no alteró la dinámica y el Mallorca rozó el segundo en el 49', con un tiro de Ángel que se encontró con el palo. No había noticias del Sevilla, que buscó la reacción con un triple cambio.

La maniobra de Lopetegui funcionó y el conjunto hispalense despertó por fin de su letargo, acosando a un Mallorca que lamentaba no haber sentenciado cuando tuvo la ocasión. En el 59 entre Manolo Reina y el palo evitaron que el remate de Rafa Mir acabara dentro de la portería, en el 70 el meta hizo un paradón a Ocampos y en el 73 por fin llegó el empate gracias a un golazo de Lamela, que se sacó de la chistera un gran disparo de rosca a la escuadra.

A falta de 20 minutos para el final, el escenario del partido dio un vuelco. Eran los sevillistas los que llevaban la iniciativa en busca del liderato en solitario de LaLiga Santander. Los locales, para colmo, se quedaron con uno menos por la expulsión de Jaume Costa.

En el 94 llegó la locura al Visit Mallorca Estadi. Ocampos marcó a puerta vacía para dar la victoria al Sevilla en el último suspiro, pero el VAR revisó la acción y señaló mano de Fernando, que había asistido al argentino, tras un buen rato de deliberación. A los de Lopetegui, que durante 70 minutos lo hicieron todo para perder, se les escapó la victoria en el último segundo por obra y gracia del VAR.