Dos jugadores con contrato no entraban en los planes para la próxima temporada de Joan Plaza, pero sólo uno de ellos, Michal Ignerski, tomó la puerta de salida hacia San Sebastián después de acordar la rescisión del año que tenía firmado, más uno opcional, con el Cajasol. Hay otro que sigue dando quebraderos de cabeza a Juan Llaneza. Responde por Branko Milisavljevic. Oriol Humet le ofreció una campaña y media garantizada en Sevilla y el base se aferra a lo pactado.

Desde hace mucho tiempo su agente fue informado de que Plaza no desea que está en la plantilla, pero no le encuentran acomodo en ningún otro equipo por el momento, pues la ficha del serbio, como la de Ignerski, también es bastante alta, y se ha convertido en un sinvivir para los hispalenses a menos de tres semanas para que arranque la pretemporadas, que se inicia en Sevilla y tendrá también Gerona como destino para llenar el depósito de gasolina.

En esta tesitura, Milisavljevic será citado por el Cajasol para que se incorpore al equipo el próximo lunes 24 de agosto, cuando los jugadores se verán las caras en Sevilla para empezar con los clásicos reconomientos médicos. Su agencia de representación en España, U1st, trabaja para conseguir un sitio en el que estén complacidos por recibir los servicios del veterano director de juego balcánico, pero ya tienen constancia de que no formará parte del plantel sevillano bajo ningún concepto, siendo en principio los bases previstos Calloway, el reubicado Miso y, quizás, el checo Satoransky, que alternaría el primer equipo con el de la LEB Plata, como también ocurrirá con la otra perla que han firmado los cajistas, el internacional sub 18 Joan Sastre.

Milisavljevic, aunque tiene en mente poder jugar minutos la próxima temporada, no está preocupado por la situación por ahora, pero en San Pablo piensan que su posición variará cuanto más se vaya acercando la fecha de incorporación al equipo.

La actualidad de los refuerzos mantiene en primera línea al lituano Jankunas, quien ayer en su país volvió a incidir en que necesita más tiempo para decidir su futuro, mientras que el plazo dado por el Cajasol está cada día más cerca de expirar. Plaza y Llaneza están muy interesados en el báltico y a eso se debe la paciencia. Menos prisa hay por cerrar la incorporación del escolta estadounidense. Las llegadas de Jankunas y de San Emeterio, si no se tuercen las previsiones, deben ser antes, pues entiende Llaneza que hay un porrón de alternativas en el mercado.

Asimismo, al director deportivo del Cajasol le lleva pasando por la cabeza hace meses la posibilidad de conseguir a un jugador que él adora: Jordi Trias. Lo veía inviable, dado su caché, y casi que lo sigue viendo igual, aunque ha vuelto a preguntar por la acumulación de interiores del Barcelona, que seguramente hará que salga. Además, Gary Neal sí gustaba, pero tiene contrato en Treviso y el Caja no pagará la salida de ningún jugador.