Paco Chaparro compareció contrariado en la sala de prensa del estadio Vicente Calderón, tras perder un partido en el que "se pudo hacer algo más". De hecho, el técnico verdiblanco afirmó que "si Sergio García llega a marcar en el mano a mano el marcador ya se hubiese quedado en empate, porque desde ese momento ningún equipo hubiese arriesgado más".

Con todo, y pese a las opciones que tuvo el Betis de llevarse para Sevilla algo positivo, el trianero fue crítico con la labor de los suyos: "El partido, en líneas generales, no me ha gustado. Una cosa es tener la pelota, y otra tener velocidad y profundidad. Nos faltó mucho de estas dos cosas durante la mayor parte del tiempo", explicó el protagonista, que, además de una derrota, se trajo la dolorosa noticia de que no podrá contar ni con Mehmet Aurelio ni con Emana para la última cita del año por acumulación de tarjetas: "No es un disgusto, pero lo cierto es que estaba pensando en cambiarlos a los dos con el 1-0. La tarjeta de Mehmet Aurelio no tiene mucho sentido, porque simplemente ha hecho un gesto levantando la mano. Debemos pensar en que no los tenemos para el Athletic, aunque recurriremos la suya, no la de Emana. Como al Betis lo tratan tan bien, a ver si hay suerte", agregó el preparador heliopolitano.

Dos zarpazos locales decidieron el choque en sendas contras. El Betis sabía que la velocidad de los madrileños es su mejor arma, y, pese a entrenarlo a conciencia, no salió todo como se creía: "Cuando el partido no termina en lo que esperas te quedas con mal sabor de boca, como si hubiese faltado algo que no sabes qué es. En la tabla estamos tal y como hemos jugado en el Calderón. Nos falta algo", explicó Chaparro, que se lamentó de las oportunidades erradas: "Tuvimos dos ocasiones claras, pero no estuvimos acertados arriba. Intentamos frenar sus contraataques, pero cuando vas perdiendo hay que salir de atrás a empatar y se crean los espacios. Era eso o amarrar a Agüero y quedarnos con el 1-0. Sin embargo, si llega a marcar Sergio García, el marcador se hubiese quedado así, porque la gente no hubiese salido tanto ni con tanta alegría".