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A vida o muerte por los octavos

  • Los checos dependen de sí mismos, no así los turcos, que además de ganar necesitan un milagro

República Checa y Turquía se enfrentarán en el duelo de los equipos peor parados del Grupo D y apurarán sus opciones de alcanzar los octavos de final con un duelo a vida o muerte en el Stade Bollaert-Delelis.

De los dos, el equipo de Pavel Vrba es el que tiene más opciones de avanzar. El empate (2-2) que consiguió al final del choque frente a Croacia dio la vida a un equipo que parecía sentenciado.

Una victoria dejaría a los checos con cuatro puntos y bastantes opciones de ser uno de los cuatro mejores terceros de los seis grupos del torneo. Depende de sí mismo.

Pero Vrba no podrá contar con su máxima estrella. Rosicky, con una lesión muscular, no podrá disputar lo que queda de Eurocopa. El veterano jugador del Arsenal, se despidió de las grandes citas internacionales por la puerta de atrás.

Después de una temporada en la que apenas jugó por culpa de las lesiones, la puntilla definitiva le llegó en el peor momento, justo cuando parecía estar recuperado.

Sural será su sustituto en la media punta y el resto del equipo, salvo sorpresa, será el esperado. Puede haber alguna duda, como en la delantera, pero es probable que de nuevo Necid se imponga al veterano Lafata para salir desde el inicio en el partido más importante para el cuadro checo.

Enfrente tendrá a un conjunto al borde de la eliminación, pues Turquía necesita un milagro para alcanzar los octavos de final. Después de sumar dos derrotas, ante Croacia (1-0) y España (3-0), necesita ganar con un buen margen de goles y esperar otros resultados para poder seguir en la competición como tercero de grupo con tan solo tres puntos.

El equipo que dirige Fatih Terim espera que sus dos mejores jugadores, Turan y Calhanoglu, aparezcan de una vez por todas para obrar el milagro. La decadencia de ambos en la competición ha llegado acompañada de un bajón enorme en el juego otomano, que ofreció una imagen muy mala.

Turan, pitado por su propio público durante el choque ante España, necesita reivindicarse para callar a una afición que señala lo señala como máximo culpable de la situación de su selección.

Terim podría hacer algún cambio. Es posible que la joven promesa Mor aparezca en el once inicial para revitalizar a un equipo deprimido, aunque no sorprendería que finalmente eligiese a los mismos hombres que, hasta la fecha, no han conseguido dar una alegría a su país.

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