La una de Albacete, la otra malagueña (prefieren dejar sus identidades en un segundo plano) pero es en Madrid donde en un pandémico 2020 nace la idea de Mëstiza, esta auténtica fantasía en la que flamenco y electrónica se abrazan en una propuesta sonora y estética que ya ha conquistado a medio mundo. Con recientes éxitos como Mis ojos, con La Mari de Chambao, o Lágrimas, con la cantaora onubense Argentina y las cubanas Pauza, Mëstiza sigue dando pasos adelante en una escena que ensanchan con cada nueva actuación. En Andalucía tendremos la oportunidad de verlas este próximo agosto en Almería (14) Marbella (16 y 27), Sevilla (18), en Cádiz (19, Sotogrande y 20, San Fernando Bahía Sound) y Málaga (26).

–Hay una frase que Mëstiza adora, la de “el brillo de los ojos no se opera”, de Lola Flores. ¿Qué es eso inherente a ustedes que no tiene nadie?

–Pues que nosotras desde el primer momento pusimos nuestra mirada y nuestros ojos en la tradición española. Ese es el foco del proyecto y desde ese punto empezamos a crear nuestros ritmos, a mirar hacia atrás, a los músicos que representan a España, para poder hacer nuestras sesiones.

–¿Cuál es la reacción del público de fuera de España que no es tan conocedor de los elementos base de esta propuesta?

–Muy buena porque el concepto de marca España, con lo que tiene que ver con la cultura latina, está muy reconocido en el mundo. No nos cuesta esfuerzo que la gente reconozca lo que es el flamenco pero sí es verdad que con la manera que nosotras tenemos de acercarlo pues se les hace un poquito más fácil de experimentar.

–¿Cuál fue la principal complicación a la hora de maridar flamenco y electrónica?

–La realidad es que la música electrónica, al igual que cualquier tipo de música, tiene nexos de unión con otras. No es difícil, simplemente se trata de unir conceptos. Nosotras veníamos haciendo organic house y, obviamente, el flamenco es muy orgánico, tiene muchísimos elementos instrumentales por lo que no nos fue difícil combinar estos dos géneros. A nosotras nos sirvió mucho de referencia lo que se venía haciendo en el afro-house o el latin-house.

–¿Tenían experiencia previa con el flamenco? ¿Eran aficionadas, les gustaba?

–Es que nosotras, aunque nos dedicamos a la electrónica, desde pequeñas hemos vivido el flamenco en nuestras casas. Siempre ha estado en nuestras vidas.

–Y en sus entornos más flamencos, ¿se tomaron bien este enlace con la electrónica que están propiciando?

–Muy bien. Bueno, a ver, al principio cuando empiezas un proyecto artístico pues la familia está un poco como que no sabe qué va a pasar... En plan, “niña, haz algo serio”... Pero pronto se dieron cuenta que sí que era serio y nuestras familias están súper orgullosas, alguno se ha hecho hasta un instagram sólo para enseñarle lo que hacemos a sus amigos. Nos apoyan muchísimo.

–Hace una década, cuando empezaron sus caminos como dj´s y productoras, ¿soñaron alguna vez con un proyecto como Mëstiza?

–La verdad es que las dos por separado teníamos siempre esa locura de utilizar nuestra tradición para llevarla a la escena actual y cuando nos juntamos la primera conversación que tuvimos sobre el proyecto fue esa, el querer empoderar nuestra cultura en el mundo porque al final la electrónica es universal y por qué no va a poder estar sonando en un club a las cuatro de la mañana Camarón, Lole y Manuel o Lola Flores. Ese era el sueño.

–Eso sería en fechas de pandemia, más o menos...

–La pandemia hizo que pudiéramos tener tiempo de calidad juntas, porque en otro momento cada una estaría por su lado con un montón de trabajo y bolos.

–Por sus experiencias, ¿cómo lo tiene la mujer en la electrónica?

–Tanto en la electrónica, como en cualquier trabajo, las mujeres y los hombres tenemos que esforzarnos, tener ideas y trabajar mucho para llegar. Para nosotras no ha sido un problema pero tampoco ha supuesto ningún beneficio ser mujer. Lo que hemos hecho es pelear por una idea. Pero sí que es verdad que hacen falta más mujeres en la electrónica, aunque cada vez se están animando más.

–La apuesta estética de Mëstiza también es muy potente. ¿Es otro de los pilares del proyecto?

-En realidad, para nosotras lo más importante, y siempre lo va a ser, es la música, nuestra producción musical. Ese es el 95% del proyecto. Pero como en el flamenco, y en el show en general, la imagen es muy importante queríamos traer de una manera muy respetuosa la tradición de la imagen del flamenco. Nos parece importante llevar también la tradición a través de la estética, pero no es lo principal.

–¿Qué es una Fiesta Sacro?

–Sacro es la manera en la que nosotras vemos el universo que hemos creado con Mëstiza. La magia de la electrónica y el embrujo del flamenco. Es una fiesta que hacemos en varios lugares del mundo, pero tiene bastante presencia en España, tanto en Ibiza como en Madrid, y es un concepto en el que invitamos a los espectadores a vivir la experiencia de la electrónica con un baile flamenco, en la que las tradiciones españolas están muy presentes... Lo mejor es que vengan a verlo...

-¿Y de disco? ¿Se puede hablar?

-Pues claro que sí. Se llamará Quereles y está previsto para octubre. Va a estar lleno de cantaores españoles y de productores internacionales que le van a dar ese punto que buscamos.

–Por último, confiesen su copla o corte flamenco favorito

-Es difícil... Últimamente es muy referencial para nosotras el Omega de Enrique Morente pero, bueno, podríamos decirte innumerables temas flamencos que son una inspiración, al igual que artistas actuales, como La Plazuela, que son maravillosos.