Despedida a medias en Colmenar

El teniente Santiago Hormigo Ledesma y el sargento Joaquín López Moreno, fallecidos en accidente aéreo en Bosnia, recibieron ayer su último adiós oficial en un solemne funeral de Estado celebrado en el Cuartel General de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (Famet), con sede en Colmenar Viejo (Madrid), unidad a la que pertenecían ambos militares.

Aunque las honras fúnebres eran en honor de los dos fallecidos, en el acto de la mañana sólo estuvo presente el féretro del sargento López Moreno, ya que la familia del teniente Hormigo Ledesma prefirió un funeral en la intimidad. Ambos recibieron la Medalla al Mérito Militar con distintivo amarillo, otorgada a los militares que mueren en acto de servicio.

El secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez, y el jefe de la Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra, teniente general Virgilio Sañudo Alonso de Celis, fueron las máximas autoridades que presidieron las exequias, que contaron con la presencia de la viuda y los padres del sargento López Moreno y casi un centenar de amigos y compañeros de ambos militares pertenecientes al Batallón de Helicópteros Ligeros de Ataque de Almagro (Ciudad Real).

Acudieron asimismo a la ceremonia otras personalidades políticas como el alcalde de Colmenar Viejo, José María de Federico, del Partido Popular y los portavoces de PP y PSOE en la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados, Jesús Cuadrado y Beatriz Rodríguez-Salmones, respectivamente.

Un grupo de unos 120 boinas azules de distintas unidades del Ejército compuesto por una escuadra de gastadores, una banda de música y una compañía de honores precedieron la llegada del féretro, que entró cubierto por la bandera de España llevado por ocho portadores a paso lento y al son de la marcha fúnebre hasta el lugar donde se encontraban familiares y autoridades. El capellán de la base de Colmenar Viejo ofició una misa en recuerdo de ambos oficiales en la que se vivieron momentos de gran intendad para los familiares, como la entrega de las condecoraciones y una corona de flores de manos de sus compañeros, el toque de oración o el canto del himno de las Famet recordando que "siempre estarán preparados para luchar, vencer o morir".

Para cerrar el acto, que duró casi una hora, los portadores plegaron la bandera que cubría el féretro para que el teniente general Virgilio Sañudo Alonso y Constantino Méndez se la entregaran, junto con una boina de la unidad, a la viuda del sargento López Moreno.

El himno de España y, nuevamente, una marcha fúnebre acompañaron la retirada del féretro a hombros de los portadores, a quienes siguieron unos familiares y amigos emocionados. Ya por tarde se celebró un funeral privado e íntimo en la Basílica de Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina (Toledo), de donde era natural López Moreno.

Los cuerpos llegaron la madrugada del viernes al sábado en un avión de la Fuerza Aérea a la Base Aérea de Torrejón (Madrid) procedentes de Bosnia, donde fallecieron el pasado jueves en accidente de helicóptero. Tras ser trasladados al Hospital Militar Gómez Ulla para que se les practicasen las autopsias, el cuerpo del sargento López Moreno llegó de madrugada a la base de Colmenar Viejo, donde fue velado por sus familiares hasta la hora del funeral de Estado.

A lo largo de la semana, una comisión de las Famet contactará con la familia del teniente Hormigo Ledesma para hacerle entrega de la Medalla recibida a título póstumo.