La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, informó ayer de un "incidente" con un pesquero español en aguas de Somalia que "no ha llegado a mayores" y que todos sus tripulantes se encuentra "bien".

Según diversos medios, unos piratas en un esquife (embarcación habitual de los secuestradores somalíes) intentaron abordar el Iria Flavia, que tiene base en Bermeo, al igual que el Alakrana, y lleva diez tripulantes a bordo, cuando se encontraba a unos 2.000 kilómetros de la costa de Somalia.

El Iria Flavia, un buque auxiliar de la flota del grupo atunero vasco Albacora, logró escapar gracias a una avería en la embarcación de los piratas y se refugió en el archipiélago de Chagos.

A los 29 días del secuestro del Alakrana, los armadores dieron ayer la bienvenida al real decreto aprobado por el Consejo de Ministros que permitirá embarcar agentes privados de seguridad con armamento de guerra en los buques que faenan en el Océano Índico. Así lo expresaron los responsables de las dos organizaciones españolas de buques atuneros que faenan en el Océano Índico, Anabac y Opagac en una conferencia de prensa en La Moncloa con la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa.

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, pidió a las familias que confíen en las gestiones del Ejecutivo para liberar al Alakrana.

De la Vega recibió por la tarde en el Palacio de la Moncloa a representantes de la Confederación Española de Pesca, que agrupa a los armadores, para informarles de las nuevas medidas aprobadas por el Gobierno para reforzar la seguridad en aguas del Índico.