El Colegio de Abogados de Sevilla denunció este viernes la sede “indigna y tercermundista” del nuevo juzgado de Sanlúcar la Mayor, que se ha instalado en unas caracolas colocadas en el patio trasero de los antiguos juzgados.

También la Asociación de Fiscales denunció las condiciones ""absolutamente inadmisibles" del local, "no solo por la dignidad de la función a la que servimos, sino porque el ciudadano merece una Justicia de calidad".

Un funcionario entra en la nueva sede judicial de Sanlúcar

El juzgado número 5 de Sanlúcar se creó hace treces meses, en octubre de 2017, y su fecha de entrada en funcionamiento era este 30 de noviembre, por lo que desde ese mismo momento comenzó a recibir asuntos a trámite. Las obras en el nuevo edificio que debe albergarlo no están terminadas porque empezaron hace un mes, por lo que la Junta de Andalucía ha optado por instalar unas caracolas en el patio de la actual sede judicial, hasta ahora utilizado como aparcamiento de coches para el personal. 

El despacho del juez se ha ubicado en la sala que hasta ahora usaban los abogados en la sede judicial, por lo que éstos se han quedado sin un lugar donde despachar con sus clientes. El secretario también ha desplazado a los mediadores de las dependencias que utilizaban. 

El decano del Colegio de Abogados, José Joaquín Gallardo, ha trasladado a la Junta de Andalucía su "malestar por la concatenación de circunstancias que han motivado esta situación, que aún siendo transitoria resulta indigna para el servicio público de la Justicia”.

“Instamos a la Consejería de Justicia a que se aceleren al máximo las obras de adecuación de las dependencias definitivas de este nuevo órgano judicial, tan necesario en un partido judicial que es, por desgracia, un punto negro en el mapa judicial de la provincia de Sevilla”, indicó Gallardo a este periódico.

Por su parte, el coordinador del Colegio de Abogados en el partido judicial de Sanlúcar, Manuel Colorado, explicó que las caracolas le parecen “tercermundistas, en un patio de hormigón lleno de agujeros y charcos”, donde el ambiente de trabajo “va a ser agobiante”.

 Allí se han instalado siete mesas para los funcionarios pero será donde el juez tenga que tomar las declaraciones, ya que el despacho habilitado para el magistrado es insuficiente para que se sienten el secretario, el fiscal, los abogados y los policías que trasladen al detenido.

Colorado lamentó la “falta de previsión absoluta” por parte de la Junta de Andalucía por no haber empezado a tiempo las obras de reforma en la nueva sede judicial, donde según los planes se instalará este juzgado de nueva creación y el número 3, de Violencia de Género. Los juzgados de Sanlúcar, recuerda Colorado, "siguen entre los más atascados de Andalucía".

También criticó la situación en que han quedado los abogados desalojados del despacho que usaban hasta ahora. “Despachamos con los clientes en el pasillo”, lamenta el coordinador del colegio profesional. 

Por su parte, la Asociación de Fiscales denunció en un comunicado “las condiciones en las que la Consejería de Justicia pretende que jueces y fiscales  ejerciten las funciones que  constitucionalmente les son atribuidas” en Sanlúcar. En particular criticó que se haya llegado a esta situación “pese a que tenía conocimiento, desde hace más de un año, de que este órgano judicial tenía que entrar en funcionamiento el día 30 de noviembre de 2018”.

“Denunciamos públicamente que las condiciones en que el responsable autonómico pretende que se desarrolle el trabajo de todos los profesionales de la Justicia en dichas instalaciones son absolutamente inadmisibles, y no solo por la dignidad de la función a la que servimos, sino porque el ciudadano merece una Justicia de calidad, independiente y prestada, ya que desgraciadamente no puede ser en óptimas condiciones, al menos, en condiciones dignas”.

Del juzgado-cochera a las caracolas

Algunos recordarán esta imagen del año 2007. 

El juzgado-cochera....

Sólo le falta el vado. La fotografía muestra el juzgado-cochera que la consejería de Justicia abrió en Sanlúcar la Mayor como juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3. La apertura de este juzgado en una cochera fue objeto de críticas y burlas en su momento.