Vacante el sillón de la RAE al que aspiraban García Gual y Rosa Montero

El sillón M de la Real Academia Española (RAE) continúa vacante después de no lograr ninguno de los candidatos que aspiraban al mismo los apoyos necesarios en la votación celebrada la tarde ayer en el Pleno de la RAE. Los aspirantes al puesto, que ocupó hasta su muerte en octubre de 2015 el poeta y crítico madrileño Carlos Bousoño, eran el helenista y escritor Carlos García Gual (Palma de Mallorca, 1943) y la escritora y periodista Rosa Montero (Madrid, 1951).

Ninguno de ellos obtuvo la mayoría necesaria en la última de las votaciones previstas, que se desarrollan en secreto. Según los estatutos de la RAE, para resultar elegido académico, en esta votación final se requieren como mínimo los sufragios "favorables de la mitad más uno de los académicos presentes" en el Pleno.

En el caso de Rosa Montero, su candidatura fue propuesta por los académicos Carme Riera, Pedro Álvarez de Miranda y Margarita Salas. La de Carlos García Gual contaba con el respaldo de Juan Luis Cebrián, Carmen Iglesias y Francisco Rodríguez Adrados. Tras el cierre de plazo de presentaciones de candidaturas, la proclamación se realizó en el Pleno del pasado 20 de abril.

La RAE cuenta con un total de 46 sillas académicas. Actualmente, además de la M, está vacante la correspondiente a la letra J, cuyo último titular fue dramaturgo, ensayista y dibujante manchego Francisco Nieva, fallecido el pasado mes de noviembre a los 92 años.

Recientemente se ha cubierto la plaza de la silla K, que estaba vacante desde la muerte de Ana María Matute en junio de 2014. Su sillón lo heredó, el pasado mes de abril, el arabista granadino Federico Corriente, aunque aún no ha pronunciado su discurso de ingreso (el plazo máximo para hacerlo es de años a partir de la elección).