Las ciudades góticas europeas, el compositor Juan Sebastián Bach y la música sacra conformarán los tres ejes del XXV festival de Música Antigua que Sevilla acogerá desde el 1 al 14 de marzo.

En una rueda de prensa, la delegada de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, Maribel Montaño, ha presentado la nueva edición de este festival que organiza el Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS), en colaboración con el Instituto Nacional de Artes Escénicas (INAE) del Ministerio de Cultura y la entidad Cajasur.

Según Montaño, este año se han intentado combinar la música con espacios patrimoniales como el hospital de la Caridad, los Reales Alcázares, la iglesia de la Magdalena, la casa de los Pinelo o la parroquia del Sagrario.

El festival, que contará con una inversión de 275.000 euros, tiene previstas las interpretaciones de Café Zimmermann, Mala Punica, La Poème Harmonique y Canto Coronato o la clavecinista Celine Frisch, entre otros; todo ello bajo la presencia "excepcional" de Gustav Leonhardt , considerado el máximo referente en la interpretación de la música antigua.

Además de los trece conciertos, se han organizado actividades paralelas como un seminario de música de la época tardo-medieval o conferencias.