Disparates con toga y birrete

NADA garantiza nada. Ni los títulos y méritos académicos, ni las cátedras, ni las publicaciones, ni el prestigio. El nacionalismo eclipsa la inteligencia. Lo prueba el simposio España contra Cataluña, un disparate togado, una locura con doctorado, una manipulación con birrete. El catedrático de Historia Moderna Lluís Roura ha dicho que el título del simposio "no es una manipulación política" porque "hay un conflicto histórico, la lucha como concepto histórico". El catedrático emérito de Historia de Cataluña y director del Centro de Historia Contemporánea de Cataluña, Jaume Sobrequés, ha definido la victoria de Felipe V como un "delirio represivo". El catedrático de Historia Contemporánea Solé i Sabaté ha enfatizado que el "Estado español de siempre, ensimismado, no acepta ninguna cultura más que la propia. Ninguna identidad diferente, todo hace creer que sólo sabe vivir en sí misma, en una espiral autodestructiva que absorbe libertades, culturas, derechos e igualdad". Los tres pertenecen a la Autónoma de Barcelona.

El presidente del Instituto de Estudios Catalanes, Joandomènec Ros, además de llamar "caverna" a quienes critican el simposio, ha salido por las peteneras del descubrimiento de América y el exterminio de los indígenas. El historiador Duran Solà ha utilizado los términos "colonización" y "genocidio cultural" para referirse a la actuación de España en Cataluña. El más prestigioso de todos ellos, Josep Fontana, catedrático emérito de la Universitat Pompeu Fabra, se ha extendido solidariamente sobre las diferencias entre la evolución de Cataluña y otras zonas de España, afirmando "que aún se opta por nuestra reducción a una provincia más de Castilla". Desde la discrepancia Álvarez Junco, catedrático de Historia de la Complutense de Madrid, ha dicho que "Fontana es un historiador respetable y respetado, que quizá tenga alguna tendencia a planteamientos maniqueos, que si antes abrazó el marxismo rígido, ahora está más bien en posiciones nacionalistas". Se ha quedado corto. Fontana, por ejemplo, publicó un artículo en El Periódico (11-3-13) titulado La deriva nazi del Partido Popular en el que defendía "la semejanza que tienen, en sus objetivos, la actual política centralizadora del Partido Popular y la actuación del NSDAP (el partido nazi alemán) en 1933, en su lucha por hacerse con el poder absoluto". Y esto es algo más que una tendencia a planteamientos maniqueos.