Vázquez Consuegra hará el edificio que suplirá a su Factoría de las Artes

Aunque el proyecto cambia, el arquitecto será el mismo. Guillermo Vázquez Consuegra ya trabaja en el futuro proyecto de un edificio en Tomares que tendrá la doble función de centro cívico y residencia de mayores. El acuerdo al que llegó con el alcalde, José Luis Sanz (PP), le permitirá trabajar en el mismo espacio que su antecesora, Antonia Hierro (PSOE), había previsto para construir la llamada Factoría de las Artes.

La llegada a la Alcaldía de Sanz, que logró el cargo con el apoyo del único edil andalucista, Alberto Mercado, supuso olvidarse de un proyecto que llevaba la firma del mismo arquitecto que había dirigido el proyecto de la nueva Casa Consistorial, para el que utilizó el modelo de una hacienda rural habilitado con las comodidades de un edificio moderno.

Durante dos meses, Vázquez Consuegra intentó infructuosamente hablar con el nuevo alcalde de Tomares. La situación se desbloqueó en un espacio muy solemne. Juan Ignacio Zoido y Vázquez Consuegra forman parte del Patronato del Alcázar. El arquitecto solicitó la mediación del portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sevilla y la respuesta fue inmediata. José Luis Sanz convocó a Vázquez Consuegra a una reunión a la que también asistió el arquitecto municipal. El ambiente era proclive a la ruptura de las negociaciones, es decir, que el Ayuntamiento le pagara al arquitecto los honorarios por los servicios prestados y que se olvidara del proyecto. Se llegó a una solución intermedia. El discurso de Vázquez Consuegra convenció al alcalde hasta el extremo de que el arquitecto municipal calificó a su colega como "un encantador de serpientes".

Las relaciones se han normalizado, aunque ya no habrá Factoría con ese guiño para Andy Warhol. El alcalde le argumentó al arquitecto que por mucho dinamismo cultural que haya en Tomares y el Aljarafe entero las dimensiones de la Factoría rayaban lo faraónico. Vázquez Consuegra le regaló a Sanz dos libros dedicados a su obra arquitectónica y el alcalde le ha encargado un segundo proyecto: la rehabilitación del espacio que rodea al Ayuntamiento para convertir un aparcamiento en una plaza y ganarle varios metros al muro de contención que separa el Consistorio del campo de fútbol para construir en ese espacio intermedio un edificio de uso municipal. Una obra que pretende mejorar los accesos.

El arquitecto se congratula de que un mismo profesional pueda trabajar indistintamente para alcaldes de partidos distintos, a veces antagónicos. Su idea es que la Administración debe ser única, por lo que no entiende que por circunscribirse a la capital la obra de la Avenida de la Constitución la asumiera Tráfico, que se la encomendó a una empresa alemana, y la de la Alameda de Hércules sea competencia de la Gerencia de Urbanismo con la supervisión de Izquierda Unida, que gobierna en el distrito Casco Antiguo.

Vázquez Consuegra no quiere que le tachen de arquitecto "del PSOE" por dirigir el proyecto del palacio de San Telmo para la Junta o de "traidor" porque lo hace para un Ayuntamiento gobernado por el PP. Vázquez Consuegra participará próximamente en México en un seminario internacional sobre intervenciones en edificios históricos en el que hablará de sus trabajos en San Telmo, en Génova y en el Museo de la Ilustración de Valencia. Una de las primeras demandas de Sanz al tomar posesión en Tomares fue exigir que el Metro llegue a esta localidad. Un medio de transporte que el 20 de diciembre echará a andar en Sevilla con un triste récord, según Vázquez Consuegra. "Es el único Metro sin intervención de arquitectos". Dice que eso no pasa en ningún Metro del mundo. Los mejores arquitectos portugueses han trabajado en los metropolitanos de Lisboa y Oporto, Norman Foster intervino en el de Bilbao y Santiago Calatrava en alguna estación del de Valencia.

Dos proyectos para Tomares en el estudio de Vázquez Consuegra, que una vez a la semana da clases en Suiza y retomó su actividad tras un mes de vacaciones en el Sudeste asiático, incluido un trayecto por el río Mekong desde Pnom Penh a Saigón.