Cuatro goles en 60 minutos. Eso fue lo que tardó el Levante en poner de nuevo al Betis en la realidad de lo que viene siendo la temporada verdiblanca: una portería de nivel bajo, una zaga con centrales amortizados, un pivote lento y un ataque con poco gol.

El conjunto de Alexis siguió con los tres centrales –esta vez con el doble pivote Guido-Carvalho cerrado por Canales en el triángulo– y firmó unos buenos 20 minutos de partido, en los que perdonó hasta en dos ocasiones (Canales y Fekir), pero el que apareció de verdad fue el equipo de Paco López, que halló una vía de penetración con el juego directo a Mayoral y las incorporaciones de Bardhi por el costado de Barragán y Bartra. Así llegaron los primeros dos tantos locales.

La pizarra del Betis.

A la vuelta de la caseta, el Betis hizo agua con la defensa adelantada y los espacios a su espalda, algo que aprovechó el cuadro valenciano con la velocidad de Morales, la movilidad de Bardhi y las incorporaciones de Rochina, muy libre y casi sin vigilancia.

Cuatro tantos en una hora de partido en la que el Levante, con el mismo guión tras los cambios, pudo ampliar la renta de haber estado más finos en el último pase para romper el fuero de juego ante un Betis que tiró del orgullo de Canales y Juanmi para acabar maquillando el resultado.

Defensa

Una verbena, así pudo definirse el partido que firmó el Betis a nivel defensivo, tanto de forma individualizada como en el global del sistema. Mayoral se sintió siempre muy cómodo y desarboló a su rival. Primer gol: pase en largo de Postigo al hueco entre Barragán y Bartra que aprovecha el ex delantero del Real Madrid para irse de Bartra con suma facilidad, y ante la tardanza de Feddal en la cobertura fusilar a Joel. Segundo gol del Levante: otra jugada similar de transición rápida tras balón largo que Mayoral controla, abre a Rochina y este a Bardhi, que vuelve a dejar en evidencia a Bartra y, esta vez, también a Joel, al que batió con total facilidad.

En la segunda mitad, el Levante aprovechó los espacios a la espalda de la zaga para ampliar su ventaja ante un Betis que otra vez se desangró por la endeblez de una defensa que tampoco contó con la ayuda de un pivote tan lento como Guido Rodríguez, que aparte de ralentizar la salida de la pelota perdió varias nada más sentir algo la presión del rival.

Ataque

Fekir apareció en el tramo inicial del partido, gozando de ocasiones claras para haber marcado. Buscó a Canales y la conexión con Barragán, pero se chocó con Aitor Fernández, al igual que el cántabro. Álex Moreno, por el otro costado, estuvo nulo en ataque. Sólo el orgullo de Canales y la entrada de Juanmi dio algo de más mordiente al Betis en la segunda mitad para maquillar el marcador.

Virtudes

El Betis no bajó los brazos con 4-0.

Talón de Aquiles

La nula fiabilidad defensiva.