El cierre de la jornada, en esos lunes que tanto le gustan a Javier Tebas, deja un duelo por Europa entre dos equipos que quieren dar un paso adelante en la segunda vuelta del campeonato. La lucha por la séptima plaza, que podría tener el premio europeo según el desarrollo final de la Copa del Rey, es la meta tanto del Betis de Quique Setién como del Celta de Juan Carlos Unzué, dos técnicos con un libro de estilo con muchas similitudes y que anteponen el fútbol ofensivo a cualquier precaución atrás.

El partido, además, dispondrá una batalla en la medular, donde ambos tratarán de imponerse para dominar el balón, ese preciado tesoro para dos entrenadores que también se empeñan en convertir en protagonistas a sus porteros. Así, tanto Rubén Blanco como Adán tendrán trabajo extra una jornada más, con esos riesgos en el área propia que tantos nervios generan en sus propios aficionados, pero que los técnicos consideran claves para crear espacios.

La pizarra

Y es que tanto el Celta como el Betis, pese a sentirse a gusto como dominadores de la pelota, también manejan el contragolpe como una de sus armas preferidas. La velocidad de Tello o la inteligencia de Joaquín para habilitar a Sergio León aparecen dentro de los recursos ofensivos de los verdiblancos; los movimientos de Iago Aspas o el uno contra uno de Pione Sisto están dentro del manuel del equipo vigués que también cuenta con un rematador potente como Maxi Gómez.

Precisamente, el duelo entre los pistoleros, Iago Aspas y Sergio León, acaparará parte de los focos del duelo de esta noche. El de Moaña, internacional con España, se encuentra en plena madurez, lo que incluso aumenta su idilio con el gol; el palmeño, titular indiscutible para Setién, quiere continuar reivindicándose en ese Betis de su alma.

No se esperan demasiadas novedades en el once de Setién. El cántabro lleva semanas prácticamente con lo puesto para completar las convocatorias, ante la ausencia de refuerzos, e incluso se ve obligado una vez más a contar con jugadores que tienen un pie fuera del Betis. La principal duda llega con Feddal. El hispano-marroquí ha vuelto a estar esta semana entre algodones por esas molestias en el tendón de Aquiles que ya lo amargaron en un tramo de la primera vuelta, por lo que su presencia en el once es muy dudosa, lo que abriría la puerta a Amat. Eso sí, en la zaga regresa Barragán, uno de los más regulares del campeonato, y que no sólo aporta experiencia atrás sino que se incorpora con peligro al ataque.

Con Fabián al mando de las operaciones, los verdiblancos quieren aprovechar la debilidad del Celta como local, donde no gana desde el pasado mes de noviembre cuando superó al Leganés por la mínima. Los heliopolitanos, además, han mejorado su imagen foránea y acumulan dos victorias seguidas lejos del Villamarín -ante el Málaga en la Rosaleda y el derbi de Nervión-.

Tampoco se esperan cambios en el Celta. Las dos victorias seguidas fuera de casa han aupado a los de Unzué, que dejaron dudas en la primera vuelta y que ahora se han conjurado para mejorar sus prestaciones y pelear por Europa hasta el final. Si en el Betis es Fabián el motor del equipo, en los vigueses su futbolista más omnipresente es Wass, quien partiendo desde la derecha es el mejor socio de los jugadores de ataque.

Con todos estos alicientes, y el arbitraje del murciano Sánchez Martínez, el Betis buscará asaltar la séptima plaza que ocupaba el Celta hasta esta jornada. El objetivo de jugar en Europa la próxima campaña pasa por Vigo, donde esperan Iago Aspas y su tropa con idéntico sueño continental.