Las arcas municipales ingresan por la recogida de basura sólo la mitad del coste real del servicio. Hacienda se embolsa 35,5 millones de euros por los impuestos que pagan los sevillanos para que se le retiren los residuos sólidos de sus domicilios, mientras el servicio genera un gasto de 67 millones. A esta acentuada diferencia entre lo que se recauda y su coste real, hay que sumar el reiterado incumplimiento que se ha venido produciendo en los últimos años con las previsiones presupuestarias de este servicio municipal.

Los técnicos apuntan que esa falta de cumplimiento se debe a las predicciones al alza sobre la recaudación que se vienen elaborando desde el mandato del popular Juan Ignacio Zoido, que implantó un nuevo modelo de gestión del cobro de esta tasa que consiste en cruzar los datos con el catastro y el IBI para que afloren los servicios que se prestan y por los que no se cobran. Desde el equipo de gobierno socialista apuntan que este desnivel seguirá existiendo (igual que con otros servicios públicos como el cementerio), y garantizan que se revisará el sistema de cobro y las futuras previsiones con la idea de ajustarlas a la realidad.

En el desglose de los costes presupuestarios de 62,7 millones hay un gasto para personal de 29,9 millones, la compra de bienes corrientes y otros servicios se lleva 15,7 millones, las cargas financieras 3,3 millones, y la imputación de gastos generales del Ayuntamiento 13,7 millones. La amortización del inmovilizado son 3,2 millones. Estos guarismos aparecen en el estudio realizado por los técnicos municipales para tasa por la recogida de basuras o residuos sólidos urbanos y residuos sanitarios. En el apartado de ingresos se detallan que los ingresos previstos son de 35,5 millones, por lo que el resultado de la explotación es un servicio deficitario en 31,5 millones.

En el estudio de la tasa aparece que el desembolso en personal es de 29,9 millones

El equipo de Juan Espadas ha cerrado para el año que viene realizar una revisión de la ordenanza que regula la tasa de basura que afectará a los apartamentos turísticos, las residencias de estudiantes y los colegios mayores, que deberán abonar desde principios del año que viene un suplemento similar al que pagan los hoteles.

Todo ha sido posible tras el acuerdo alcanzado entre el gobierno socialista y Adelante Sevilla. La ordenanza de la tasa de basura será modificada con el objetivo de que el coeficiente aplicable se reduzca para los hogares en un 7%, al pasar de un 56% sobre el consumo de agua por parte del hogar a un 52,3%. Los técnicos detallan que con este descenso se evita que la actualización de las tarifas del agua necesaria para la realización de inversiones de Emasesa repercuta en el tributo de residuos. El Ayuntamiento defiende que no tendrá impacto alguno el nuevo precio público del agua en la tasa de basura.