Nadie entre que no sepa Bolonia

Como ya es tradición, la gran mayoría de los más de 5.500 estudiantes sevillanos que ayer realizaron las primeras pruebas de Selectividad optaron por el texto periodístico, que este año estuvo dedicado a la implantación del Espacio Europeo de Educación Superior (Plan Bolonia). Como opciones, el examen daba a elegir entre un artículo de José Ignacio Cubero en el diario Abc sobre la reforma universitaria europea frente a un fragmento de La verdad sobre el caso Savolta, la novela de Eduardo Mendoza que ya es todo un clásico en el examen de ingreso en la universidad.

Que nadie se lleve a engaño. La razón por la que los estudiantes escogieron el texto de Bolonia se debió a la "facilidad" del mismo y no al profundo conocimiento sobre el proceso. Así lo manifestaron a este periódico los alumnos encuestados en la nueva Facultad de Derecho, una muestra significativa del panorama educativo español en la que, por poner tres ejemplos, cohabitaban estudiantes de un colegio masculino privado del Opus, Tabladilla; de un concertado, las Carmelitas de Nervión; y de un instituto público, el Hermanos Machado de Montequinto.

Sin embargo, siempre hay excepciones, como Ana García, una estudiante de las Carmelitas que quiere estudiar Derecho y dedicarse a combatir la violencia contra las mujeres. "Bolonia es muy positiva, porque vamos a trabajar más y estaremos más controlados con las tutorías. Además, nos abrirá las puertas de Europa. Los que protestan son los que siempre están tirados en el césped". Otro enterado, Eleazar Fuentes, alumno del Instituto San Pablo y futuro filólogo, aunque cree que "hay aspectos positivos", muestra su "preocupación por el encarecimiento de los estudios que supondrá el proceso". Un compañero de centro, Daniel Santos, apoya la opinión: "Yo no tengo problemas económicos, pero los más necesitados van a tener problemas". Gael Gilibert, estudiante del IES Hermanos Machado y aspirante a veterinario, también cree que "lo de las becas préstamo" no beneficia a los alumnos. Sin embargo, otros como Carlos Garrido, portavoz de la mayoría, se abstiene de opinar: "en el instituto no nos han explicado absolutamente nada".

El ambiente en las puertas del aulario de Derecho es diverso, a los alumnos angustiados con la necesidad de sacar nota para entrar en una determinada carrera se unen otros que, simplemente, no se juegan nada, porque no piensan ingresar en la universidad. Por ejemplo, David Ledo se examinará próximamente para ingresar en la Academia de la Guardia Civil de Valdemoro y hace la prueba para "tener puntos de cara a un futuro ascenso en el cuerpo. Cuando ya esté trabajando quizás estudie una carrera, algo fácil". En una situación parecida está Daniel Santos, que hará un grado superior de FP en realización audiovisual y "luego me plantearé si realizo Comunicación Audiovisual o Relaciones Públicas".

Después de media hora de descanso, los estudiantes entraron a la segunda prueba que da a escoger entre Historia (la favorita) y Filosofía. En la primera opción se podía elegir entre un texto sobre la crisis del 98 y otro de la Guerra Civil, en concreto el decreto de unificación de la Falange con la Comunidad Tradicionalista Carlista. Por paradójico que pueda parecer, la mayoría de los estudiantes encuestados optaron por el tema del siglo XIX. Las razones son variadas. "El siglo XIX, exceptuando la época de Isabel II, es más fácil que el XX, que tiene temas muy largos y complicados como la II República o la Guerra Civil. La época de Franco y la Transición son más fáciles", afirma Carlos Piñol, un estudiante de Tabladilla que quiere estudiar Derecho. Para otros como Antonio López Franco, del IES Hermanos Machado, la razón es mucho más sencilla: "Al profesor no le dio tiempo de llegar a la Guerra Civil".

En la opción de Filosofía se dio a escoger entre un texto de Descartes del Discurso del método, y otro de Kant de la Fundamentación de la metafísica de las costumbres. Entre los estudiantes que se decidieron por esta posibilidad existía cierta contrariedad. "Lo normal es que caiga Platón, Nietzsche u Ortega. Este examen es muy difícil", indica David Ledo. La Selectividad continuará hasta mañana con las pruebas de las asignaturas optativas.