El cambio en Obras Públicas dilata la respuesta a las alegaciones del Metro

Las 170 alegaciones que se presentaron a los anteproyectos de las líneas 2, 3 y 4 del Metro de Sevilla siguen a la espera de una respuesta oficial y política, cuando se cumplen dos meses desde que se cerró el plazo para que los ciudadanos, entidades y juntas de distrito presentaran sugerencias. La anterior consejera, Rosa Aguilar -hoy ministra de Medio Ambiente-, anunció que su departamento respondería a todas los que alegaran al Metro durante el mes de octubre, pero el cambio político en este departamento ha alterado tal compromiso.

Según ha podido saber este periódico, el equipo de la nueva consejera, Josefina Cruz Villalón, una verdadera experta en ordenación del territorio y urbanismo, está revisando todas las peticiones que hicieron los ciudadanos, entidades y empresas, así como los compromisos que adquirió su antecesora Aguilar. El objetivo de tal revisión es valorar en su conjunto las implicaciones económicas y urbanísticas que tendría aceptar ciertas alegaciones delicadas, sobre todo las que piden extender las líneas más allá de los límites previstos.

La consejera prefiere no concretar en público cuándo resolverá políticamente este trámite esencial para cerrar la redacción de los proyectos de construcción de las líneas de Metro. Sólo entonces se podrán sacar a concurso las primeras obras.

Ferrocarriles andaluces, el organismo que emite los dictámenes técnicos sobre las propuestas, defiende que la Consejería todavía está "en plazo" y agrega que la legislación del sector ferroviario no impone límite alguno para responder cuando hay "causas justificadas". La administración dice que tiene justificación por el cambio político en Obras Públicas (la nueva consejera juró su cargo el 21 de octubre) y por el volumen de alegaciones recibido en los casi tres meses que dio para recibir sugerencias. El reglamento del sector permite responder por vía boletín oficial (BOJA) cuando las alegaciones son voluminosas.

Respecto a la repercusión de este retraso, Ferrocarriles afirma que la redacción de los proyectos constructivos de la 2, 3 y 4 "sigue adelante" y no se ha paralizado por la resolución de las alegaciones. Según la Junta, las empresas de ingeniería contratadas para hacer los proyectos constructivos han "avanzado sustancialmente" en estos meses en definir los servicios afectados, la geotecnia, los aspectos medioambientales (ruidos y vibraciones), y el cálculo de estructuras del Metro tanto en los tramos preferentes como en el resto del trazado. Las ingenierías sólo están dejando a un lado las cuestiones más "peliagudas" que dependen de la respuesta política a las alegaciones.

Ferrocarriles explica que muchas propuestas tienen una enorme implicación económica y del modelo de ciudad que fijó el Plan General (PGOU) de Sevilla, por lo que precisan de un análisis más profundo. La consejera quiere analizar al detalle las propuestas de los anteproyectos del Metro que han contado con oposición de los ciudadanos (por ejemplo el paso por el Parque Celestino Mutis, la ubicación de las cocheras...).

Antes del relevo de Rosa Aguilar, Obras Públicas estaba dispuesta a aceptar varias alegaciones. En la línea 2, la parada de Cristo de Burgos como segunda estación del centro aparte del Duque; el trazado subterráneo de los 200 metros del nudo de la avenida Montesierra de Sevilla Este que cruzan con la SE-30, y "potenciar la cobertura" en Torreblanca y Parque Alcosa bien desviando el Metro a estas zonas o bien con otras soluciones.

En la línea 3 se aceptó una parada en San Jerónimo (en febrero de 2011 se prometía tener la solución técnica para reutilizar las antiguas vías del tren); soterrar el Metro por la Ronda Norte y prolongar la línea hasta Bellavista (promesa adquirida por Aguilar el 5 de mayo en el Parlamento andaluz).

En la línea 4, alejar la estación del interior del Parque Celestino Mutis para ubicarla en el exterior de esta zona verde.

La novena modificación que se admitió era cambiar la ubicación de las cocheras y talleres de las líneas 3 y 4 para no afectar a la ampliación del Parque del Alamillo ni a los suelos del Higuerón.

La escasez de presupuesto es otro de los retos que debe afrontar la nueva consejera. Su antecesora prometió licitar e iniciar las primeras obras de las nuevas líneas en 2011, pero Josefina Cruz Villalón sólo habla de sacarlas a concurso, nada de construir. Y no es para menos. Su consejería sólo tiene 5 millones de euros de inversión real para gastar el año que viene, los justos para acabar los proyectos constructivos de las tres líneas y licitar algún tramo, según advirtió recientemente el diputado andaluz del PP y aparejador Jaime Raynaud.