El bar Los Príncipes, sito en la calle Arfe, esquina con García Vinuesa, cerró el viernes a las doce del mediodía tras 38 años abriendo al público con esta denominación. Su titular, José Maroto Perea, fue homenajeado por los vecinos y clientes del Arenal en la hora del rezo del Ángelus, pues el bar tenía una decoración muy relacionada con la Semana Santa, las cofradías, el barrio y siempre en un ambiente familiar.

Maroto ya estaba trabajando en este bar como empleado desde años antes. De hecho, existe constancia de que en tiempos se llamó El Balconcillo y hay fotografías de los años 30 de la pasada centuria. En 1974 se convirtió en responsable del negocio y lo mantuvo como Los Príncipes hasta el pasado viernes. La causa del cierre está relacionada con la finalización del contrato de alquiler.

La vocación hostelera de la familia Maroto continuará en otros dos establecimientos muy próximos, ubicados en las calles Cristóbal de Castillejo y Federico Sánchez Bedoya.