Agentes de la Policía Nacional detuvieron sobre las cinco de la tarde de ayer jueves a dos varones en la calle San Luis de Sevilla por su presunta implicación en un delito de robo, ocurrido en un establecimiento comercial de la zona.

Gracias a la colaboración ciudadana los agentes pudieron intervenir de forma rápida y eficaz en una riña entre el encargado del establecimiento y los detenidos, evitando un mal mayor.

Ambos fueron trasladados a dependencias policiales y han pasado hoy a disposición judicial.

Por otro lado, el pasado martes en la Avenida de la Constitución, un turista detuvo a un ladrón cuando acababa de sustraer el móvil de otro turista a la altura de Puerta Jerez.

Las personas se arremolinaron alrededor del turista que retenía al ladrón

El delincuente iba ataviado como un foráneo con una mochila colgada a su espalda, y cuando trataba de huir fue atrapado por un turista que no lo dejó ir. El ladrón intentó zafarse pero no lo consiguió, siendo retenido por el viajero hasta que llegó la Policía. Antes de que los agentes llegaran la pareja a la que había robado el móvil pudo recuperar el terminal. 

El pasado 20 de julio la Policía Nacional detuvo en Sevilla al autor de al menos siete robos con fuerza en comercios que se ocultaba tras siete identidades falsas distintas y que cuenta con numerosos antecedentes policiales. El ladrón tenía en vigor varias reclamaciones judiciales por diferentes Juzgados españoles. En el momento de su detención acababa de robar en una tienda de carcasas de móviles en la calle Francos.

El detenido buscaba establecimientos comerciales que no dispusieran de reja protectora, para así lanzar contra el escaparate algún tipo de objeto contundente, y poder acceder al interior y llevarse lo máximo posible en el menor tiempo. Con este método había actuado en otras ciudades como Madrid, Santander, San Sebastián, Bilbao, León, varios puntos de la Comunidad Valenciana, Huelva y Sevilla.

Según la policía, en Sevilla robó en siete comercios con este método, de los que los últimos tres se produjeron en dos días. Los agentes que han llevado a cabo la investigación constatan que los daños causados durante el robo era en muchas ocasiones superior a lo conseguido.

Esta forma de actuar propiciaba "además intervenciones policiales no exentas de peligro", según señala la Policía. De hecho en una persecución del ahora detenido, tras haber perpetrado un robo en un establecimiento de carcasas de móvil en el centro de Sevilla, dos agentes en moto sufrieron un accidente con lesiones de diversa consideración al colisionar entre sí.

El detenido ha sido puesto a disposición de la Autoridad Judicial, por estos siete nuevos robos con fuerza, así como por las numerosas requisitorias judiciales que tiene pendientes en toda la geografía española y ha decretado su ingreso en prisión.