Un alto mando policial dice que el jefe conocía la falta de control de la droga

Un alto cargo de la Policía Nacional en Sevilla ratificó la pasada semana semana ante la juez de Instrucción 19 la falta de medidas de control y vigilancia sobre la droga almacenada en la Jefatura Superior de la avenida de Blas Infante y aseguró que el antiguo jefe superior tenía pleno conocimiento de estas deficiencias.

El comisario Domingo Carrasco, ex jefe de la brigada de Policía Judicial y actual jefe de Extranjería, compareció el pasado lunes ante la juez, que mantiene abiertas diligencias contra tres mandos de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) por un presunto encubrimiento del robo de más de 150 kilos de heroína y cocaína en el año 2008.

El ex jefe de la Policía Judicial admitió que no existía ningún protocolo de seguridad sobre la droga intervenida en distintas operaciones y que se almacenaba en los calabozos de la Jefatura Superior. Además, informó a la juez de que si ese protocolo hubiera existido tendría que ser competencia de la brigada de Seguridad Ciudadana, responsable de la vigilancia de los calabozos y el resto de las dependencias policiales.

En ningún caso ese protocolo debería ser aplicado por la Udyco, puesto que esta unidad se dedica a la investigación contra el tráfico de drogas y el crimen organizado y no de la custodia posterior de las sustancias intervenidas.

Igualmente, este comisario explicó que el entonces jefe superior de Policía en Andalucía Occidental, Enrique Álvarez Riestra, tenía pleno conocimiento de estas carencias, puesto que antes de ser el máximo responsable de la Jefatura había pasado varios años como inspector de los servicios de la misma.

Carrasco dejó claro que en los calabozos en los que se guardaba la droga no había cámaras de videovigilancia ni tampoco se documentaban las entradas y salidas de los policías ni a quiénes se les entregaban las llaves de los calabozos.

El comisario también expuso que desde el año 2002, seis años antes del robo, los responsables de la Policía Nacional habían alertado de la gran cantidad de droga que se almacenaba en la Jefatura y que incluso habían mantenido varias reuniones con las autoridades judiciales para tratar de solucionar este asunto y tratar de acelerar la destrucción de las sustancias. En estos encuentros también había participado la fiscal jefe de Sevilla, María José Segarra, que ahora acusa a estos funcionarios.