Cuando parecía que el horizonte se aclaraba en el Sevilla hacia el azul de las nuevas perspectivas, de nuevo un nubarrón aparece para estropear el paisaje. Mientras el club anunciaba las buenas nuevas de los regresos a los entrenamientos grupales de Jesús Navas y Mariano, así como la implicación de otros futbolistas necesitados de ritmo competitivo que se ejercitaron en el día de descanso para empezar a sumar, como Acuña, Joan Jordán y hasta los sanos Soumaré y Marcao, Gudelj recibía la peor de las noticias: el resultado de las pruebas médicas daba un diagnóstico más que fastidioso. Tiene el menisco externo de su rodilla izquierda roto y debe pasar por el quirófano.

En mitad de la temporada, eso supone que estará un par de meses de baja más el tiempo de readaptación a la competición. El problema se suma a la marcha de Fernando del Sevilla, con lo que la posición de medio centro defensivo vuelve a ser foco de incertidumbre. De garantías para este puesto clave en cualquier estructura de equipo está Soumaré, solo ante el peligro. ¿Y Agoumé? Está por ver.

El joven medio centro francocamerunés despuntó como internacional sub 17 de Francia y fichó por el Inter en 2019, para empezar un largo periplo de cesiones. Pero pese a que incluso debutó el pasado otoño en la prestigiosa sub 21 gala, apenas tiene bagaje en la alta competición. Es un melón por calar, uno de esos futbolistas a los que hay que esperar, pero que debe ocupar un puesto trascendental, el que ha venido defendiendo Fernando en las cuatro temporadas anteriores y que en la media campaña actual apenas ha aparecido. El peso de la edad ha sido excesivo para el formidable centrocampista brasileño, que deja una huella imborrable en Nervión, tan amplia como su hueco en el equipo.

La falta de relevo de Fernando

Quizá uno de los problemas más graves, en consonancia con el declive del Sevilla desde enero de 2022, fue que Monchi no encontró un relevo que fuese haciéndose al puesto mientras Fernando estaba en plenas condiciones. Y eso que arribó al Ramón Sánchez-Pizjuán con 32 años recién cumplidos, para el nuevo proyecto que el gestor de San Fernando puso en manos de Julen Lopetegui en el verano de 2019. Entonces también llegó Gudelj, como un polivalente medio centro que también podía actuar de central y que ahora tiene 32 años y una lesión propia del desgaste de un futbolista que fue candidato a salir en cada verano y ahora es echado de menos.

Curiosamente, Gudelj se confirmó como un futbolista de club que tapó el obvio hueco, por diferentes circunstancias, en el eje de la zaga. Y justo cuando Quique Sánchez Flores lo adelantó de nuevo ante la baja sobrevenida de Soumaré por un problema médico familiar, ante el Athletic de Bilbao, dio la cara la lesión que estaba solapada tras esos bloqueos que venía sufriendo el serbio en la rodilla izquierda.

Las diferencias entre Soumaré y Agoumé

Ante el Athletic, por cierto, el Sevilla echó de menos la prestancia de Soumaré, una apuesta de Víctor Orta llegada al final del mercado estival como cedido con opción de compra, la misma fórmula usada para la adquisición en invierno de Lucien Agoumé.

José Luis Mendilibar no quiso precipitarse con Soumaré y Diego Alonso, en cambio, le dio galones en su debut ante el Real Madrid, partido en el que sorprendió su muestrario futbolístico: a su capacidad para el robo une una virtud que también echa en falta el Sevilla, la distribución de la pelota con criterio y verticalidad. Algo de lo que, en principio, carece Agoumé.

El joven Agoumé tiene un perfil distinto al de Soumaré y hasta ahora apenas ha jugado los minutos finales del Salernitana-Inter, cuando ya ganaba el líder de la Serie A por un contundente 0-4. La temporada pasada sí tuvo más presencia en su segunda cesión a la Ligue 1. En el Troyes jugó 15 partidos del campeonato liguero y no ayudó mucho a evitar el descenso de categoría del equipo aubois. En la anterior cesión por parte del Inter, al Brest, participó en 27 encuentros de la Ligue 1: 42 encuentros en total en la élite...

En el Sevilla debe pasar un proceso similar al que tuvo Soumaré, claro que éste llegó con 24 años y experiencia en la Premier League y en la Ligue 1, que ganó en 2021 con el Lille (32 partidos). Su bagaje era muy superior al de Agoumé. El peso de la estructura recaerá sobre Soumaré, el único pivote de garantías ahora mismo.