La última semana de la temporada se aproxima al Ramón Sánchez-Pizjuán. En un día que, seguro, será tenso por las protestas y manifestaciones de la afición nervionense, Quique Sánchez Flores se despedirá del Sevilla en un complicado duelo ante el FC Barcelona. En el banquillo de enfrente se sentará Xavi Hernández, que también está ante su último encuentro como técnico culé. Un día de muchas emociones en el feudo blanquirrojo.

Para la cita, el entrenador nervionense decidirá su último equipo titular a las órdenes de este Sevilla. Con el regreso de Boubakary Soumaré tras sanción y la posible inclusión de Marcos Acuña en la convocatoria finalmente, hay pocas dudas a la hora de pensar cuál podría ser el once elegido por Quique Sánchez Flores.

El once tipo... y dos dudas

Quique Sánchez Flores es un hombre con ideas fijas. Lo ha demostrado en sus cinco meses como entrenador del Sevilla y, salvo sorpresa mayúscula, no parece que vaya a cambiar en la última jornada. Por ello, las probabilidades son altas de que el once titular ante el Barcelona se parezca mucho a los anteriores.

Nyland estará bajo palos. Por delante del noruego, una defensa de cinco formada por Juanlu Sánchez -Jesús Navas no arriesgará-, Loïc Badé, Sergio Ramos, Kike Salas y, en principio, Adrià Pedrosa. Marcos Acuña quiere estar en el partido y, seguramente, se reparta minutos con el catalán, aunque, parece, que el ex del Espanyol podría salir de inicio.

En la medular existe una gran duda. Quique Sánchez Flores elogió el trabajo de Manu Bueno en el encuentro ante el Athletic Club en San Mamés, por lo que podría darle una nueva oportunidad. Sin embargo, lo más normal sería ver a Lucien Agoumé y Boubakary Soumaré, quien vuelve de sanción, en el doble pivote. Por delante, Lucas Ocampos, Dodi Lukebakio y Youssef En-Nesyri parecen inamovibles.

Quique Sánchez Flores antes de su penúltima comparecencia previa a un partido del Sevilla.