Causa criminal

“No me van a creer”: las palabras de la víctima del caso Alves cuando sucedieron los hechos

Dani Alves

Dani Alves / EFE

El pasado 13 de enero la jueza titular del Juzgado número 15 de Barcelona decretaba la prisión provisional y sin fianza para el ex jugador brasileño de fútbol Daniel Alves, por haber violado, presuntamente, a una chica en la noche del 30 al 31 de diciembre del año pasado en la discoteca Sutton de Barcelona.

Después de un cambio de abogado por parte de la defensa, la estrategia de su nuevo letrado, Cristóbal Martell, es intentar que éste salga de prisión hasta que se pueda celebrar el juicio por los hechos. Para ello ha consentido, entre otras cosas, dar una elevada fianza, llevar un dispositivo para evitar su fuga, o presentarse en los juzgados diariamente, si fuera necesario, para confirmar que sigue en Barcelona.

La decisión de la jueza de que Alves ingresara provisionalmente en prisión vino después de escuchar la declaración de la víctima, que fue contundente y resultaba veraz, de ver las pruebas que ésta presento y de escuchar la versión de Alves, que cambió hasta en tres ocasiones la explicación de lo que había sucedido dicha noche. 

Ahora desde el juzgado se centran en estudiar el recurso presentado por el abogado de Alves para determinar si le conceden o no la libertad provisional.

Relaciones consentidas

Daniel Alves, a pesar de haber cambiado de versión hasta en tres ocasiones, mantiene que las relaciones que tuvo con la chica de 23 años fueron consentidas. Esta es la estrategia que va a seguir la defensa para evitar la prisión del deportista.

Frente a ello la víctima sigue sin cambiar su versión y sus amigas, que fueron llamadas a declarar la semana del 30 de enero, han afirmado que cuando salió del baño estaba visiblemente afectada.

La versión de los testigos

Según contaron las amigas de la chica ante la jueza, ninguna de las tres conocía que había un baño en la zona VIP en la que se encontraban. De hecho han relatado que, de haberlo conocido, no habrían hecho cola en el baño general de la discoteca.

Además, una de ellas ha explicado que cuando su amiga le contó lo sucedido, decidió llamar a su jefe puesto que trabaja en un bufete de abogados, para que les asesorara sobre qué hacer. Éste también ha sido llamado a declarar como testigo indirecto y su versión coincide con el relato de los hechos que han dado todos los testigos y que apoyan la versión de la víctima.

La Unidad Central de Agresiones Sexuales (UCAS) liderada por varias mujeres agentes de Mossos d’Esquadra, destacan esta llamada telefónica en su atestado porque se trata, a criterio de las investigadoras, de añadir todos los elementos posibles que ayuden a analizar el comportamiento de la víctima en los momentos posteriores a la presunta violación y en los que mantuvo una coherencia de relato que no ha variado hasta el día de hoy.

El jefe de la sala, también llamado como testigo, ha contado además que la chica estaba en pleno ataque de ansiedad cuando ocurrieron los hechos y que no paraba de lamentar que nadie la iba a creer cuando contara lo que le había sucedido.

La fiscal y la abogada de la víctima presentarán esta semana sus alegaciones contra la petición de libertad del futbolista solicitada por Martell a la Audiencia de Barcelona.

 

 

 

 

 

 

 

 

  

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