Volver al campo, desde el siglo XXI

Desde el 12 de julio soy presidenta de la Diputación de Cádiz. En mi discurso de investidura me propuse, como una máxima para los próximos cuatro años, combatir el desempleo con todas las energías personales, con todo el empeño de los profesionales de la institución provincial y con todas las posibilidades presupuestarias a nuestro alcance. Por supuesto tejiendo alianzas: con instituciones públicas, con empresas, con los agentes económicos y sociales, con los centros de investigación.

En este reto la Diputación de Cádiz va a maximizar sus competencias, sobre todo asistiendo a las entidades locales como destinatarias prioritarias de nuestras políticas y servicios; y cuando la competencia no recaiga directamente en esta casa, seremos el socio necesario para que las iniciativas que pretenden empleo y desarrollo económico se hagan realidad.

El proyecto que promueve el Grupo Operativo de Innovación Invitec-PX es un buen ejemplo de esta actitud. Es una alianza, que compartimos Diputación, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Jerez-Xerez-Sherry, la Universidad de Cádiz, la asociación Ecovalia y la bodega Williams & Humbert. El objetivo: recuperar el cultivo ecológico de la uva Pedro Ximénez. El proyecto contempla dos campañas; de momento al término de la primera los resultados son prometedores: en las catas, los vinos resultantes de los procesos ecológicos -sin herbicidas ni productos químicos de síntesis- convencen por su sabor, en mucha mayor medida que los cultivos convencionales. Tras el verano llegará una nueva vendimia en el pago de Dos Mercedes -en Jerez- y un nuevo asoleo.

En definitiva nos estamos esforzando para que afloren productos de calidad. Vinos que se distingan en unos mercados que demandan producciones sostenibles y tratadas con esmero. Consumidores gourmet que buscan un espectáculo sensorial. Y desde la provincia de Cádiz podemos satisfacer esa demanda. Tenemos el producto, empresas de prestigio y centros de investigación e innovación.

La Diputación de Cádiz también respalda, en el ámbito de la viticultura, el primer laboratorio apegado a unas viñas, al amparo del proyecto Vitilab. Se ubica en el pago de Campano, en Chiclana, en terrenos de la bodega Manuel Aragón. En este enclave y asociados a la Universidad de Cádiz y al Consejo Regulador de los vinos de Jerez estamos investigando las mejores técnicas para fortalecer -con criterios sostenibles- hasta siete variedades autóctonas: vijiriega, uva rey, Pedro Ximénez, moscatel de Chiclana, palomino fino, perruno y beba.

Al igual que sucede con el proyecto del grupo Invitec-PX queremos que los resultados finales de toda esta investigación se transfieran a productores y emprendedores. Que tengan a su disposición buenas prácticas para abrir nuevos negocios. Queremos prestigiar el campo y los oficios apegados a la tierra. Alentando un relevo generacional que tanto necesitamos. Que las personas jóvenes vean y perciban que el sector primario debe ser un ejemplo de innovación y progreso.

Esta convicción la queremos trasladar a todos los sectores productivos de la provincia de Cádiz. Abriendo nuevas posibilidades a los recursos que nos han estado esperando.

Volver al campo, desde el siglo XXI.