Después del éxito de ventas en España y su posterior edición en francés con traducción de François Zumbielh, vicepresidente del Observatorio para las Culturas Taurinas, el libro Diálogo con Navegante (Espasa), y editado por la Fundación José Tomás, será presentado hoy en París. Dicho acontecimiento tendrá lugar en El Théatre de l'Alliance Française o de la Maison des Cultures du Monde de la ciudad, el lugar escogido para dicho acto, que contará con la presencia de la leyenda del toreo.

El texto del Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, metido en la piel del toro que habla a José Tomás, es la joya del libro, que parte del discurso de matador en 2012 en la entrega del Premio Paquiro. "Usted y yo no somos amigos ni enemigos. Pero, con un poco de esfuerzo y responsabilidad, podemos ser cómplices y aliados, indispensables el uno para el otro, como una pareja de bailarines, de actores o de músicos durante un bello espectáculo", escribe Vargas Llosa.

Además cuenta con el prólogo de Luis Abril, ex secretario general de Telefónica, y se completa con una sucesión de capítulos de máxima categoría: Verdades sobre la arena, de Paco Aguado; La solidaridad en la cultura taurina, de Araceli Guillaume Alonso; José Tomás, de Agustín Morales Padilla; Defensa de la Fiesta, de Natalia Radetich; Valor y valores del toreo, de Zabala de la Serna, y Alma Herida, de François Zumbielh.

Diálogo con Navegante nace a raíz del discurso que el propio José Tomás escribió recordando al toro de José Garfias que le infirió la gravísima cornada que le tuvo un año inactivo y que a punto estuvo de acabar con su vida en la plaza mexicana de Aguascalientes.

El regreso de José Tomás a los ruedos parece cada día más cercano. El torero de Galapagar, inédito en 2013 por culpa de una fractura en su pie derecho, ya ve la luz al final del túnel. Así lo demuestran unas imágenes suyas que salieron a la luz a primeros de mes y en la que se ve en plena puesta a punto en la finca de Teófilo Gómez, en México, donde participó en un tentadero y al que se vio muy sonriente en todo momento. "La lesión ya es historia. Desde enero, los aficionados deberán estar pendientes, porque José Tomás clínicamente podrá torear de nuevo, ha superado con nota y buenas sensaciones los test que ha realizado en el campo", advirtió su médico personal, Rogelio Pérez Cano, en La Razón.