Ruiz Miguel ofrece una lección de toreo en la Feria de Tarifa
El maestro actúa junto a cinco jóvenes promesas, que ofrecen un bonito espectáculo
El maestro Francisco Ruiz Miguel participó ayer en la clase magistral con novilleros programada con motivo de la Real Feria de Tarifa. E hizo precisamente eso, ofrecer una clase magistral, una auténtica lección de magisterio taurino junto a cinco jóvenes promesas.
El primer novillo fue para el maestro Ruiz Miguel, que volvió a dejar muestras de un toreo eterno y dominante, toreo con la capa de manera excepcional y remato con sus peculiares medias con sabor añejo, con la muleta ayudó a su enemigo, que se rebrincaba por el pitón izquierdo sin que eso preocupara al Maestro, tandas ligadas y muy templadas de Ruiz Miguel que hizo las delicias del respetable. Tuvo el maestro el gran detalle de dejar muletear a su novillo al novillero algecireño con picadores José Miguel Luz, que estuvo a la altura dando series largas y templadas, cediéndole Ruiz Miguel la muerte del novillo. José Miguel dejo algo más de media que fue suficiente, cortando las dos primeras orejas de la tarde, en una emotiva vuelta al ruedo de Ruiz Miguel y sus alumnos. En segundo lugar actuó Jamadi Ibáñez (ET Campo de Gibraltar). El novillero barreño no logró acople con el capote, ofreció un buen tercio de banderillas y con la muleta se mostró algo acelerado, consiguió tandas de mérito a un novillo bravo que pedía distancias, tras la estocada cortó dos orejas.
El tercero de la tarde fue para Miguel Ángel Pacheco (ET Linense), quien intentó lancear ganado terreno pero el novillo se le adelantaba al embroque dificultando los lances, con la muleta el novillo fue reservado y sin mucho lucimiento. Pacheco lo intentó por ambos pitones pero no logró que su trasteo tuviera mayor repercusión dada la condición del animal, puso mucho de su parte y logró cortar una oreja.
En cuarto lugar actuó Pablo Mora, novillero más que preparado para debutar con picadores. Poco hubo que corregirle al novillero de Moralzarzal adscrito a la Escuela del Puerto Sta. María, quien tras matar de forma contundente cortó dos orejas.
El quinto de la tarde fue para el novillero algecireño de la Escuela Miguel Mateo Miguelín Corruco, quien tuvo en sus manos al mejor novillo del encierro, premiado con la vuelta al ruedo. El joven espada realizó un brillante tercio de banderillas, con la muleta logró muletazos de mérito aunque a tramos su faena careció de estructura, no obstante mostró ganas y disposición tras la estocada cortó dos orejas.
En último lugar actuó el novillero local Miguel Ángel Valencia, que lidió un novillo que quedó fuera de sorteo escogido por el ganadero Álvaro Núñez y el propio espada, el novillo presentó complicaciones al ser muy tardo, reservón y mirón, defectos que complicaron el trasteo del joven local aún muy incipiente para afrontar tantas dificultades. Sin embargo Valencia logró muletazos largos y templados jadeados por el público y mostró disposición. Con la espada resultó volteado en dos ocasiones mermando sus capacidades, ya que el novillo no descolgaba y dejaba la cara alta dificultando la suerte suprema, logró matar a su enemigo no sin esfuerzo y resultó ovacionado.
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