Tiene el tamaño de un microondas, puede colocarse en cualquier punto de la encimara y no necesita tomas de agua ni tuberías para el desagüe. El nuevo pequeño electrodoméstico es un lavavajillas, se llama Tetra y lo fabrica la compañía norteamericana Heatworks.

Gracias a unos electrodos de grafito y controles electrónicos, que aumentan la energía de las moléculas de agua de su depósito para que se muevan más rápido, este nuevo concepto de lavavajillas consigue fregar en menos de 15 minutos. Eso sí, apenas caben tres o cuatro platos, unos cubiertos y un par de vasos, pero habida cuenta de que está pensado para personas que viven solas o parejas con poco espacio en la cocina, no deja de ser un invento revolucionario que ya está a en preventa en Estados Unidos a un precio inferior a los 300 euros.

Tetra integra elementos metálicos, por lo que no hay riesgo de óxido, ni acumulación de cal. Gracias a su pequeño depósito, de algo menos de 4 litros, el lavavajillas permite realizar un importante ahorro de agua, reduciendo su consumo en 10 veces si se compara con el lavado de los platos a mano.

Su funcionamiento es simple: se llena el depósito, se pone en marcha y en 15 minutos el lavado estará terminado. El lavavajillas, que tiene forma cuadrada y es transparente, no desentona con ninguna cocina gracias a su diseño moderno y minimalista.