¡Champagne!, en la victoria lo mereces, en la derrota lo necesitas”. Esta expresión fue utilizada por Napoleón Bonaparte, gobernante francés, considerado uno de los mayores genios militares de la historia y que popularizó este vino espumoso que no falta en cualquier celebración de postín. De cara a las fiestas navideñas, Grupo Estévez, afamada empresa bodeguera del marco de Jerez de la Frontera, llevó a cabo una cata muy especial en Tierra Nuestra, templo de la exquisitez gastronómica y enológica. En ella, presentó a la sociedad española las peculiaridades de Charles Mignon, una empresa familiar francesa enclavada en pleno corazón de la región de Champaña y que palpita con fuerza en el seno de la comuna gala de Epernay.

Espoleada por más de 150 premios internacionales, esta maison es una de las más prestigiosas de la Unión de Casas de Champán. Su calidad radica en la calidad de sus terroirs, que conforman las estribaciones de la cuenca de París. Además, aunque esta aventura familiar ya tiene un largo recorrido en el tiempo, la modernidad de su bodega de pequeña capacidad termorregulada en acero inoxidable hace que la Casa Charles Mignon esté en la más absoluta vanguardia, produciendo vinos de champagne precisos.

Exclusivos champanes

La mejora de sus terruños y sus idílicas tres variedades de uva (Chardonnay, Pinot Meunier, Pinot Noir) han hecho que la empresa se lance de lleno al mercado español de la mano del Grupo Estévez con tres de sus exclusivos champanes: Brut Premier Cru, Brut Rose Premier Cru y Brut Cuvee Comte de Marne Grand Cru.

El primero de ellos, Brut Premier Cru (12º) se ha llevado a cabo con uva cosechada a mano, prensada cerca del viñedo y fermentada en pequeños tanques de acero inoxidable a temperatura controlada. Trabajo de precisión que ha permitido preservar los aromas primarios y la impronta del prestigiosa Grand Cru. Con crianza de 24 a 36 meses en la oscuridad de las bodegas francesas y a una temperatura de 12 grados, la pureza y generosidad en perfecto equilibrio son la esencia de este cuveé.

Por su parte, Brut Rose Premier Cru sigue el mismo proceso de elaboración pero con la impronta que se consigue de la combinación de “vin clair” y vino tinto del prestigioso Grand Cru de Bouzy, dando lugar a este rosado mezclado de calidad sublime.

Por último, Brut Cuvee Comte de Marne Grand Cru es un champán cuya crianza tiene una temporalidad de 36 a 48 meses, a una temperatura de 12 grados. Su aroma de gran riqueza e intensidad, regalan un gran abanico aromático que comprede frutas amarillas, pera, ciruela Mirabel, almendra, avellana y flores blancas como la acacia y con el remate de las notas de miel tostada.

Una aventura familiar

La familia Mignon proviene de una línea de viticultores nativos de Mesnil-le-Huttier, una pequeña aldea de Festigny, un pueblo ubicado a pocos kilómetros de Epernay, la capital del champán.

Bruno y Laurence han fundado una Gran Casa, pero también una familia con Manon y Guillaume. De pequeños, ambos jugaban al escondite en las bodegas… Hoy, como adultos, participan en la vida de Champagne Charles Mignon.

Los suministros de los mejores crecimientos de la zona de Champagne y la vinificación precisa de la Casa Charles Mignon les permiten presentar cuvees que combinan mineralidad, afrutado y frescura. Bruno y el enólogo de la casa buscan el equilibrio perfecto entre la riqueza gustativa del Pinot y la elegancia del Chardonnay.

En definitiva, ya lo dijo Napoleón Bonaparte; “¡champagne!, en la victoria lo mereces, en la derrota lo necesitas”. Sea como sea, Charles Mignon es buena elección.

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