Un escenario joven para el intercambio

El albergue de Inturjoven en Sevilla, situado en los aledaños del campus de Reina Mercedes, se convirtió durante el pasado fin de semana en un refugio para el teatro joven gracias a una nueva edición del encuentro CaixaEscena, impulsado por la Obra Social La Caixa como un proyecto educativo que apoya a profesores que utilizan las artes escénicas como una práctica para el desarrollo social, cultural y cognitivo de sus alumnos.

Estas reuniones son el punto culminante de un trabajo que, a lo largo del curso, han realizado 113 alumnos y 10 docentes procedentes del Colegio Sagrado Corazón de Sevilla y los institutos Maestro Diego Llorente, de Los Palacios y Villafranca; Pedro de Valdivia, de Villanueva de la Serena (Badajoz); Monterroso, de Estepona (Málaga); y Francisco Montoya, de Las Norias de Daza (Almería).

En esta edición, los encargados de conducir las jornadas fueron los miembros de Egos Teatro, que aportaron los contenidos artísticos para que los jóvenes incorporaran sus montajes. Las propuestas de los estudiantes se vinculaban a los tres itinerarios planteados por CaixaEscena: los sainetes españoles, la commedia dell'arte italiana y los temas tratados por William Shakespeare en su trayectoria. También hubo tiempo para la nueva vertiente incorporada este año, que trataba sobre la obra Música de entreguerras, de Bertolt Brecht, uno de los precursores del teatro contemporáneo.

Durante los talleres prácticos, que comenzaron el sábado, los jóvenes experimentaron el trabajo de técnicas y de conceptos esenciales para un proceso teatral, como la presencia escénica la emoción del personaje, las miradas en escena, el movimiento, las coreografías, la dicción y la impostación de la voz. Para finalizar, el domingo fue el turno de las representacion en el auditorio del albergue, donde los cinco grupos representaron un fragmento de las piezas que trabajan en su día a día.

"El encuentro CaixaEscena es un punto de referencia en nuestro trabajo anual. Les sirve a los alumnos para reforzar lo visto en el taller y para aportar nuevos aprendizajes al proyecto. Descubren el valor de lo que están haciendo y que hay otros que trabajan en lo mismo en otros centros", explicó uno de los profesores del Sagrado Corazón.