Seis palabras muy sevillanas que no se utilizan en otros lugares de Andalucía

El léxico andaluz tiene una riqueza indiscutible gracias a los muchos pueblos que se han asentado en la región con el paso de los años. Palabras como «chaval» o «bulo» provienen del caló, la lengua gitana. «Almohada», «aceite» o «alféizar» lo hacen del árabe mientras que «gazpacho» podría tener sus orígenes en una palabra griega. Esto demuestra que las diferentes culturas que han pasado por Andalucía han dejado un gran legado lingüístico que perdura hasta nuestros días.

En Sevilla se hace uso de algunas palabras que, si bien muchas de ellas tienen un origen más actual, no se usan en todos los lugares de la región, especialmente en los que están más alejados de la zona occidental. Estos son seis de los términos que se dicen o que se usaban antaño tanto en la ciudad como en algunos pueblos de la provincia y que son desconocidos para las personas de fuera:

Jama

En Sevilla, así como en otros lugares de Andalucía, se le llama «jama» al hambre, especialmente al que entra antes de las comidas principales. Es una palabra que usa, especialmente, la gente más joven y que podría utilizarse de la siguiente manera: «¡Qué jama tengo!».

Arriate

Un arriate es, según la Real Academia de la Lengua Española una «era estrecha y dispuesta para tener plantas de adorno junto a las paredes de los jardines y patios». Aunque este término sea mucho más usual no solo en Andalucía sino en otros lugares de España lo cierto es que no todo el mundo lo conoce, especialmente si se trata de gente joven.

Perol

Bien podría decirse que esta palabra se usa más en Córdoba que en Sevilla, y aunque en otros lugares de Andalucía la conocen, no la usan habitualmente. Un perol es un tipo de «vasija de metal, de forma semejante a media esfera, que sirve para cocer diferentes cosas», sin embargo en Sevilla se emplea para definir a cualquier tipo de sartén, no solo a las de gran tamaño, que es la acepción que se emplea en otros lugares de la región. En Córdoba, además, llaman perol a las comidas que se hacen en el campo, normalmente arroz, puesto que se elaboran en un perol de gran tamaño. Sería algo similar a una barbacoa.

Bulla

En Sevilla se puede emplear la palabra «bulla» para referirse a tener mucha prisa («tengo mucha bulla») o para hablar de una multitud considerable de personas agrupadas en un mismo lugar («hay mucha bulla de gente»).

Pichi

El pichi es la prenda que utilizan, sobre todo, las niñas pequeñas y que es similar al peto vaquero pero con falda, aunque con los mismos tirantes, por norma general. Puede ser de diferentes tejidos, aunque abundan los de tejido tejado y pana, y también los hay para personas adultas.

Bajío

Según la Real Academia Española. este término se define como «dicho de un terreno o luga bajo y que tiende, por su situación, a anegarse o empantanarse». En Sevilla se utiliza, sin embargo, la expresión «tener bajío» como sinónimo de tener mala suerte.