Cuando una vacuna es una vida

Una de las recientes campañas de la organización Médicos Sin Fronteras citaba que Hay algo que da más miedo que las vacunas: No tenerlas, en referencia a los adeptos al movimiento antivacunas. El pasado viernes el jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón y presidente del Instituto Hispalense de Pediatría (IHP), Alfonso Carmona Martínez, partió desde Sevilla hasta Costa de Marfil con la expedición andaluza organizada por la ONG África Arco Iris. El objetivo de la iniciativa es conseguir que más 15.000 niños del país africano salven sus vidas "gracias a las vacunas que se ponen y gracias a que las personas inmunizadas impiden que determinados virus circulen y contagien a otros marfileños", en palabras de este doctor.

Desde 2006, el IHP dirige estas campañas que han conseguido inmunizar a 475.000 niños y adolescentes y, como consecuencia, la disminución de la morbimortalidad de estas enfermedades inmunoprevenibles "en una parte del mundo donde una vacuna es una vida", explica Carmona Martínez. Por parte del IHP, también viajan los pediatras Antonio Peralta, Francisco Giménez y Alfonso Delgado, y el enfermero Alfonso Martín. En esta ocasión, se vacunará contra la meningitis tetravalente y las fiebres tifoideas en el norte de Costa de Marfil, concretamente en poblaciones circundantes a Yamoussoukro, la capital oficial: Bouaké, Lugbakro, Kapoussoussoa, Nanan, Morote, Kami, Iloba, Ndebo, Akpesekro, Zambakro, Bonzi, Sahabo, Zatta, Kossou, Artiegourro y Bonikro.

La campaña, que durará unos ocho días, cuenta con el apoyo estratégico del Gobierno marfileño y el apoyo económico de la Diputación de Sevilla, el Parlamento de Andalucía, la Diputación de Córdoba, el Ayuntamiento de Málaga y los municipios de Los Palacios y Villafranca, Dos Hermanas, Alcalá de Guadaíra, Lora del Río y La Rinconada. Además de la Fundación Cajasol, la Fundación IHP y el Colegio Oficial de Médicos Sevilla.

En el pasado otoño, se culminó la construcción de un centro de salud materno-infantil en la ciudad de Anyama, a 60 kilómetros de Abidjan, capital económica de Costa de Marfil, con una población en sus alrededores superior a los seis millones de habitantes. La misión de África Arco Iris ahora es equipar este centro. Además de estos proyectos, la ONG ha emprendido campañas de intervención de cataratas, se está construyendo una segunda escuela gracias a la Fundación Cajasol y la Diputación de Sevilla, y se han equipado orfanatos.