La Junta de Andalucía mantiene la convocatoria de las oposiciones para maestros de Educación Infantil y Primaria para este año. "No aceptamos el chantaje del Gobierno central de vincular la oferta pública de empleo a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado", afirmó el portavoz del Ejecutivo andaluz, Miguel Ángel Vázquez, tras el Consejo de Gobierno de ayer. "Pedimos al Gobierno que deje de meter miedo a los opositores, a los que no vamos a dejar que se les trate como rehenes", insistió.

Las comunidades autónomas socialistas sospechan que el Ejecutivo central mantiene el tope a la tasa de reposición como medida de presión para que se facilite la tramitación de las cuentas del Estado. Dada la configuración del Congreso de los Diputados, el Partido Popular precisa del apoyo o la abstención del PSOE para que los presupuestos salgan adelante.

El Ejecutivo regional se queja oficialmente por el retraso del pago de las becas a estudiantes

El portavoz del Gobierno andaluz recordó que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, planteó en la Conferencia de Presidentes "eliminar la tasa de reposición a cambio de aprobar los presupuestos". "Y todos los presidentes, encabezados por Susana Díaz, rechazaron este chantaje", recordó.

La Junta trasladará esta semana su intención a la Mesa Sectorial de Educación, en la que están representados los sindicatos. Tras el anuncio de ayer, CCOO exigió que no sólo se les informe en la reunión de la oferta de empleo público docente, sino que la convocatoria se publique de inmediato en el BOJA.

El sindicato tildó de "lamentables" los cambios de criterio de la Consejería, que anunció el pasado mes de octubre que la oferta para 2017 estaría conformada por al menos 2.300 plazas. Según CCOO, en la última mesa sectorial, celebrada el pasado 10 de febrero, "la administración educativa anunció que sólo está garantizada la oferta de empleo ya aprobada en 2016". "Con posterioridad, tras la denuncia sindical, ese mismo día la Consejería anunció en su web que en cualquier caso se ofertarían las 2.300 plazas inicialmente previstas", indicó el sindicato.

Por otro lado, la Junta expresó su preocupación por el retraso del abono de las becas a 113.000 estudiantes de formación no universitaria "porque el ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, no ha tenido tiempo desde el 28 de diciembre para firmar un papel". El vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, llamó ayer a Méndez de Vigo para exigir el pago de las ayudas, "que en otras comunidades sí se están pagando", según incidió Vázquez. Un aspecto que preocupa especialmente a la Junta es el caso de los alumnos de Formación Profesional de grado superior y que han convalidado alguna materia de un curso inferior. Desde una cuantía máxima concedida de más de 2.000 euros, sus becas se verán recortadas "con saña y de manera drástica hasta los 260 euros por una interpretación torticera que ha hecho el Ministerio de Educación de sus propias normas".