El Consejo de Gobierno aprobó ayer el nuevo Plan Integral para la Inclusión de la Comunidad Gitana, que contará con una dotación de 232,1 millones de euros hasta el año 2020 y que amplía las políticas de atención a inmigrantes, sobre todo procedentes de Rumanía y Bulgaria, entre otras novedades. Con 21 objetivos estratégicos y 45 específicos, las áreas que contarán con una mayor inversión son las de fomento y vivienda -hay 83 zonas urbanas desfavorecidas-, según avanzó la consejera de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio.

De las más de 300.000 personas gitanas que viven en Andalucía, que representan la mitad de todo el colectivo en España, las medidas de este plan van dirigidas a entre 95.000 y 100.000 personas, que son las que se encuentran en zonas especialmente desfavorecidas. La principales dotaciones presupuestarias procederán de las consejerías de Fomento y Vivienda (140 millones de euros), Igualdad y Políticas Sociales (58,1 millones) y Educación (28,2 millones).