"Interesan la mayoría de los que estaban en la plantilla". Son palabras de Aíto García Reneses en su puesta de largo como nuevo entrenador del Cajasol. Fue el jueves. A las 24 horas, su anterior club, Unicaja, cumplía con los pertinentes trámites y con los pronósticos enviando a la ACB una oferta por dos temporadas para contratar a Txemi Urtasun.

Lleva un mes el conjunto malagueño interesado en el navarro y ayer demostró que dicho deseo no era un farol, sino una realidad. Manolo Rubio, director deportivo de los costasoleños, lo quiere en el proyecto. El Cajasol ha sufrido un recorte considerable en las cuentas y a comienzos de semana filtraron desde el club que era implanteable competir con el Unicaja si iban decidamente a por Urtasun. Así ha sido, pero también ha cambiado la perspectiva de los hispalenses, seguramente por ser el jugador del gusto de Aíto.

Urtasun, capitán la pasada campaña junto a Triguero, se convirtió en una pieza esencial durante los dos últimos años de Plaza, sobre todo este último. Su planteamiento era renovar, aunque también su nombre se había vinculado a los mejores clubes de la ACB a la conclusión de la Liga. Sólo el Unicaja ha ido en firme a por el escolta y ya ha hecho el movimiento que todos esperaban: la propuesta por un par de temporadas. El balón está ahora en el tejado de San Pablo.

A Aíto le interesa, como también le va el juego de Earl Calloway, aunque éste busca un contrato inviable totalmente en Sevilla con la actual tesitura. Desde ayer, el Cajasol dispone de 10 días, es decir, hasta el 30, para equiparar la oferta de dos años que ha puesto sobre la mesa el Unicaja. Cuando hace sólo unos días se afirmaba desde el club hispalense que las opciones de atar a Urtasun eran remotas, hoy no lo son tanto. De hecho, ya algunos ponen la mano en el fuego por la continuidad del pamplonés, mayormente por solicitud expresa del entrenador madrileño, que es quien ha pedido ese esfuerzo a la entidad para consolidar el proyecto con el apoyo de uno de los jugadores que no sólo conoce la casa, como Triguero, Satoransky, Sastre, Bogdanovic y Tepic, sino que además ha demostrado su espíritu de lucha y su talento. Además, le birlaría de paso al Unicaja a una de las piezas con las que pensaban formar el primer equipo.

Si el Cajasol equilibrara la oferta malagueña por Urtasun, tendría que rebajar las partidas para las incorporaciones que aún debe realizar. Está pendiente de firmar a un base si la continuidad de Calloway fuera imposible, así como a otro exterior y a un interior potente que puede hacer las funciones de cuatro y de cinco.

El checo David Jelinek ha sonado para el juego exterior, pero el jugador del Joventut, que lo incluyó en el derecho de tanteo, no llegaría si se quedara Urtasun.