La Ciudad Autónoma de Ceuta ha vivido la llegada de 65 inmigrantes subsaharianos, en lo que supone la mayor entrada numérica de inmigrantes por mar en un día, a los que se podrían haber sumado otros 20 más que fueron detenidos por las autoridades de Marruecos.

La situación se ha producido alrededor de las 07:30 de la mañana cuando los inmigrantes llegaron a la playa del Tarajal, la mayoría de ellos tras cruzar a nado desde Marruecos y otros bordeando el espigón terrestre que separa los dos territorios.

La intervención de la Gendarmería marroquí, que en esos momentos estaba procediendo al cambio de turno de sus agentes, únicamente impidió que unos 20 inmigrantes consiguieran llegar a las costas españolas.

El resto, un total de 65 inmigrantes, lograron alcanzar la playa del Tarajal de Ceuta, donde fueron atendidos por dos ambulancias de la Cruz Roja Española, que tuvo que desplegar un operativo especial en la misma orilla.

Siete inmigrantes precisaron asistencia sanitaria por distintas contusiones y heridas, y solo fue necesario evacuar a uno de ellos al Hospital Universitario al presentar un traumatismo en la rodilla.

La Guardia Civil desplegó un operativo especial en la misma playa para atender a los inmigrantes y ser trasladados hasta las dependencias de la Policía Nacional, donde fueron identificados antes de ser trasladados al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).

Esta llegada de inmigrantes supone la mayor oleada en un solo día y el mayor número de personas que se lanzan a nado al mismo tiempo desde Marruecos, ya que la última vez que se produjo un intento de este tipo fue el pasado 14 de octubre cuando 37 inmigrantes alcanzaron la costa ceutí.

La Guardia Civil ha asegurado que esta misma técnica de entrada en grupo se ha repetido ya este año al menos en catorce ocasiones, la primera de ellas el 23 de mayo que supuso la llegada clandestina de catorce inmigrantes.

La entrada ha obligado a la dirección del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta a reorganizar el interior del recinto para dar cabida a los recién llegados.

El CETI tiene ahora censados a unos 740 inmigrantes, muy por encima de su capacidad que estaba inicialmente cifrada en 512 personas.

La dirección del centro ha tenido que eliminar algunos espacios comunes para habilitar nuevos dormitorios para atender a estos inmigrantes.

El CETI no está colapsado gracias a las salidas que se han producido en los últimos días de 21 inmigrantes subsaharianos que han sido enviados a centros de internamiento de la península como paso previo a su expulsión del país.