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Cultura

Schumann doble para acabar

XXIV Ciclo de Música de Cámara de la ROSS. Natalia Kuchaeva, piano. Cuarteto Milenium Arts. Programa: Obras de Schumann. Lugar: Sala Manuel García del Teatro de la Maestranza. Fecha: Domingo 15 de junio. Aforo: Tres cuartos de entrada.

Precioso fin del ciclo de música de cámara de la Sinfónica de Sevilla, con dos obras hermanas de Schumann. Compuestos ambos en el otoño de 1842 con un mes de diferencia y en la misma tonalidad, podría decirse que el Cuarteto con piano y el Quinteto con piano son complementarios: brillante y apasionado el quinteto, escrito en primer lugar; más oscuro y con un carácter acaso más visionario el cuarteto. Música en cualquier caso de indudable adscripción romántica, en la que la fantasía, la subjetiva inspiración schumanniana encaja a la perfección en la forma clásica, con esa pulsión concertante del instrumento del teclado que se equilibra de distintas formas con las cuerdas.

Aunque la acústica de la sala no benefició al piano, la joven Natalia Kuchaeva mostró su empuje especialmente en los tiempos rápidos, en los que ejerció de auténtica conductora del conjunto, como en esas continuas escalas arriba y abajo del Scherzo del Quinteto o en el final de la misma obra, en el que la progresiva complicación del tejido contrapuntístico ocasionó algún pequeño problema de claridad al grupo. El Millenium Arts mostró control, seguridad y buen empaste, aunque la viola de Jerome Ireland se esfumó (con el piano) en algunos momentos del Cuarteto y el violonchelo de Nonna Natsvlishvili sonó algo titubeante en el final de esta misma obra, para recobrar su firmeza en el inicio del Quinteto, en el que su protagonismo es notable. Centro expresivo de la obra, la marcha fúnebre del segundo movimiento resultó intensa, un poco en el límite por su lentitud y por esa figura retórica de la suspiratio que llevada a su extremo provocó un fraseo por momentos entrecortado.

Termina así este buen ciclo camerístico, que conviene agradecer a ELI, la academia de idiomas que financiará también el de la próxima temporada: el mecenazgo se hace cada vez más importante en la cultura del siglo XXI.

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