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Crítica de Teatro

Dos actitudes frente a la muerte

Santa Teresa con ciencia de amar

Compañía: Un proyecto corriente. Idea e interpretación: Juan Luis Corrientes. Dirección: Rebeca Torres. Dramaturgia: Juan Luis Corrientes / Rebeca Torres. Escenografía: Jesús Morgollón. Lugar: Castillo de San Jorge. Fecha: hasta el sábado 20 de junio. Aforo: reducido.

Bonita idea la de aprovechar para el teatro lugares tan singulares como el Castillo de San Jorge, ahora museo y antaño sede de esa vergonzosa Inquisición que con tanta saña persiguió durante siglos especialmente a los judíos conversos y a sus familias.

A una de esas familias, precisamente, perteneció Santa Teresa de Jesús, mujer extraordinaria de cuyo nacimiento se celebra ahora el V centenario, motivo de la propuesta teatral del experimentado actor Juan Luis Corrientes. Su monólogo, sin embargo, no se centra en su condición de monja descalza, de mujer que transgredió sin temor las leyes de su tiempo frente a la oposición de toda la Iglesia oficial, sino en algo que comparte con todos los seres humanos: su actitud frente a la muerte. Así Corrientes divide la pieza en dos mitades que se presentan como complementarias: una primera atravesada por la experiencia mística que hizo que Teresa de Ávila se acercara a la muerte con verdadera ansia amorosa, como el único medio posible para fundirse con toda la Creación ("… que muero porque no muero"), y una segunda en la que un hombre corriente, perteneciente a la sociedad actual, hedonista y descreída, como aquel "hombre de la flor en la boca" de Pirandello, se enfrenta y nos enfrenta a la cercanía de su muerte, o lo que es lo mismo, al carácter finito de todo ser humano.

Este sencillo planteamiento da pie a una exhibición de las dotes actorales de Corrientes, que trabaja las claves de la feminidad y la intimidad en la primera parte para derivar en una mayor extroversión, no exenta de un cierto hermetismo, en la segunda. Torres lo dirige bien y aprovecha al máximo los elementos escenográficos, sobre todo el agua de la pequeña acequia en la que se mueve durante todo el tiempo y la escalera que le permite jugar con la elevación y las reminiscencias de la historia.

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