La primera planta del Museo de Artes y Costumbres Populares, actualmente cerrada por obras, estará abierta al público en dos años, según las previsiones de su director, Antonio Limón, al frente de la institución desde hace más de 30 años. La citada planta constituye la tercera parte de las instalaciones con las que cuenta este edificio, propiedad del Estado y gestionado por la Junta de Andalucía, una condición que comparte con el resto de museos públicos de la comunidad. Se trata de una de las obras más importantes que se acometperán en el recinto situado en plena Plaza de América y fundado en 1972 sobre un pabellón mudejar diseñado por Aníbal González con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929.

El Ministerio de Cultura prevé contratar la obra de reforma el año que viene, en un proyecto que, según Europa Press, cuenta con una dotación para 2009 de 440.000 euros y de un presupuesto no fijado para 2010. En lo concerniente al edificio, los trabajos afectarán a la accesibilidad de minusválidos y la modernización de los sistemas de seguridad así como a la instalación museográfica con el fin de frenar el envejecimiento de las instalaciones. Por otro lado, estos trabajos se completarán con la actualización de la colección permanente, a la que se añadirá parte de los fondos almacenados que estaban "poco explotados". Con estas reformas, el visitante podrá contemplar en su totalidad los contenidos de este museo, que pretende divulgar e investigar el patrimonio antropológico y etnográfico autóctono a través de objetos fechados desde el siglo XIX que abarcan desde bordados hasta utensilios, mobiliario y juguetes antiguos.

Pese a las obras en la primera planta, el visitante podrá conocer el contenido de la sala dedicado al vestido, la religiosidad popular y la recreación ambientes domésticos rurales a través de una pieza audiovisual dispuesta en la entrada.

Futuras exposiciones

Junto con este proyecto, el museo tiene prevista una serie de actividades que se desarrollarán a partir del próximo otoño. La más inmediata será, según su director, "una exposición que va a dar a conocer una mínima parte de la colección de postales antiguas que acaba de adquirirse, de más de 6.000 ejemplares". Concretamente, la selección constará de unas 300 instantáneas, siendo las más antiguas de la época en que se inventó la fotografía, a finales del siglo XIX. Esta muestra será la antesala de una exposición de mayor envergadura prevista para 2010 sobre religiosidad popular andaluza en la que se aprovechará los fondos propios del museo. Según Limón, es una exposición de difícil movilidad "porque consta de objetos pesados, muy delicados y muchas vitrinas. Ha sido un proyecto en el que se ha estado trabajando estos últimos años". Además de estas muestras, la dirección del museo estudia la posibilidad de ofertar dos más: "una dedicada a bordados de cofradías de Lorca (Murcia) y otra de exvotos mexicanos, muy parecidos a los nuestros, porque comparten aspectos de nuestra religiosidad popular".

Uno de los logros de los que se siente más orgulloso Limón es la de haber conseguido que, poco a poco, el museo cuente con una plantilla que está logrando "la óptima conservación y presentación de los objetos" además de "ofrecer la posibilidad de atender a los investigadores.

Las actividades y los proyectos mencionados son un paso más para lograr transmitir la idea de este tipo de museos, que es, en palabras de Limón, "lograr que la gente reconozca su patrimonio y empiece a compararlo con otros patrimonios culturales igualmente importantes". Unas declaraciones que exaltan el valor de este espacio , de 15.000 metros cuadrados visitables (el mayor museo etnográfico del país), que cada día se mira de frente con el Arqueológico y que nos hace conocer nuestro pasado más reciente y familiar.