Cultura

El 'flashmob' flamenco

  • El fenómeno, una acción colectiva e inusual con apariencia de espontánea, llega al arte jondo en forma de protesta

La cita es a las 10:45, ya que a las 11:15 comenzará a sonar en la emisora de radio la canción por tangos Banquero, compuesta e interpretada por el cantaor Iván el Pumu. Lo primero, por tanto, es sintonizar la emisora en las cinco radios portátiles. El grupo se hace cada vez más numeroso, hasta sobrepasar la treintena de personas. Una vez reunidos todos los participantes, y aleccionados, se dirigen hacia la sucursal bancaria elegida, el Banco de Santander, en la calle Tetuán. El grupo va entrando poco a poco y la cola ante los mostradores se hace cada vez mayor. Los empleados están sorprendidos por la afluencia de público pero rápidamente se ponen en acción: tratan de descargar la cola principal atrayendo a las personas que no van a realizar operaciones en efectivo hacia las mesas laterales. Son las 11:15 y de repente suenan los tangos del Pumu en los cinco receptores de radio que han sido introducidos subrepticiamente. Las cámaras ya están instaladas, por supuesto sin contar con ninguna autorización. Es la señal: las treinta y tantas personas se van al centro de la sucursal y llevan a cabo una coreografía colectiva que previamente han ensayado. Entre ellas hay algunas bailaoras profesionales: María Ángeles Gabaldón, Noemí Martínez o Valeria Saura, que es la que ha preparado la coreografía.

Es uno de los flashmobs flamencos que en las últimas semanas vienen sorprendiendo a empleados y clientes de diversas sucursales bancarias de Sevilla. A diferencia de otras acciones de este tipo, la intención de sus convoncantes, el colectivo Flo6x8, es reivindicativa y contestataria: denunciar los abusos que a su entender han cometido las entidades bancarias y que han conducido a la actual crisis económica.

La acción se inscribe dentro del proyecto Flamenco y videovigilancia que se inició hace unos años y que se concretó también en un taller del festival sevillano Zemos98. Algunas de estas acciones se pueden ver en Youtube ("Patea el capital") aunque el colectivo está elaborando un audiovisual de mayor calado.

El guardia de seguridad del banco de Santander de la calle Tetuán está fumando cuando alguien le preguta qué pasa dentro. Dentro, un grupo de casi cuarenta personas hace un corro por tangos y en el centro tres bailaoras zapatean la juerga. El guardia de seguridad intenta atrapar a una de las bailaoras pero ésta se zafa. El director de la sucursal le pide a su empleado que se tranquilice, que no pasa nada, que no son atracadores. Una mujer, detrás del mostrador, dice que "esto es una obra de teatro". Otra, atónita, explica por teléfono a una tercera persona lo que está viendo. Algunos clientes hacen palmas. Incluso hay algunos que se suman a la fiesta.

La fiesta dura apenas unos minutos. El grupo sale poco a poco del banco y sigue la juerga improvisada en la puerta, hasta que se disuelve de forma tan espontánea como, aparentemente, había surgido.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios