El 80% del dinero que los ayuntamientos se gastan en la factura energética se produce en el alumbrado exterior, por las farolas que tienen en calle. Teniendo en cuenta este dato, no es extraño que el ahorro en ese aspecto se haya convertido en una verdadera obsesión para los gobiernos locales, cuando los ingresos han caído en picado y en la provincia hay todavía muchos ayuntamientos que tienen un camino que recorrer porque funcionan con luminarias antiguas y existen otras que pueden lograr un ahorro en consumo y en la facturación de más del 50%.

Es la razón de que muchos hayan querido afrontar esa renovación, que no es fácil ahora: están limitados por falta de liquidez y la imposibilidad de pedir créditos para hacer la inversión necesaria. De ahí el auge de los concursos para que sean las llamadas Empresas de Servicios Energéticos (ESE) las que asuman la inversión, a cambio de hacerse con la gestión del alumbrado durante unos años, normalmente entre diez y quince, por un canon fijo que les pagan los ayuntamientos. Con el ahorro en la factura, esas empresas amortizan su propia inversión y sacan beneficio.

Pero hay otros ayuntamientos que, desde el año 2009, cuando la Junta ya sacó una orden específica para el desarrollo energético sostenible de Andalucía, se han beneficiado además de incentivos públicos, procedentes de fondos Feder de la UE del marco 2007-2013. En concreto y según los datos de la Agencia Andaluza de la Energía, que los ha gestionado, trece municipios se han beneficiado de cerca de 2,5 millones de euros en ese sentido.

Por un lado, se han incentivado con un total de dos millones de euros actuaciones de mejora de la eficiencia energética en el alumbrado exterior que han llevado a cabo directamente nueve ayuntamientos. Es decir, que las han asumido con inversión propia: Las Cabezas de San Juan, Écija, Guillena, Mairena del Alcor, Olivares, Sevilla, Tocina, Utrera y Gines, que fue la última solicitud aprobada gracias a la cual el Ayuntamiento podrá recibir hasta el 80% de la inversión que necesita.

En todos los casos, se exige tener hecha de forma previa una auditoría energética, en la que quede claro dónde están los aspectos que se deben mejorar y de qué manera. Los proyectos tienen un incentivo de entre el 60% y el 80% de la inversión necesaria, a partir de 3.000 euros, dependiendo del grado de innovación que incorpore, del salto entre lo que tienen y lo que vayan a poner y si incorporan o no medidas adicionales de ahorro, como sistemas de telegestión.

No obstante, algunos de estos ayuntamientos han apostado, algunos años después de beneficiarse de esas ayudas, también por la fórmula de la gestión externalizada para ir más allá. Según fuentes de la Agencia, en principio sólo se exige que los equipos que se hayan instalado se mantengan en condiciones óptimas al menos cinco años.

Desde la Agencia Andaluza de la Energía también se han incentivado con cargo a los mismos fondos actuaciones que otros cinco municipios sevillanos han llevado a cabo a través de las citadas Empresas de Servicios Energéticos: Bollullos de la Mitación, Los Palacios y Villafranca, El Saucejo, Umbrete y, de nuevo, Olivares. En estos casos, la cuantía total de esos incentivos ha rondado el medio millón de euros. Atendiendo a la normativa europea -por la que se deben regir también los Estados miembros- los incentivos no suelen superar el 20% de la inversión y las empresas deben repercutir el dinero en los ayuntamientos, reduciendo el precio que cobran por el servicio integral -que suele incluir el gasto energético y el mantenimiento- o ampliando el plazo de suministro, sin cobrar el canon que tengan asignado.

A finales del pasado mes de diciembre, la Junta amplió por decreto el periodo de vigencia de estas ayudas, hasta el 1 de junio de 2015. No obstante y según las fuentes consultadas, se ha hecho pensando sobre todo en que dé tiempo a ejecutar algunos trabajos pendientes -como la ayuda que se ha aprobado justo ahora para Gines-, ya que por normativa europea los fondos deben estar realizados y certificados para esa fecha. Según las mismas fuentes, Sevilla es la segunda provincia andaluza que ha recibido un mayor importe de estas ayudas para mejorar la eficiencia energética del alumbrado público, que tiene que ver con la propia iniciativa de los ayuntamientos sevillanos.

Entre las actuaciones que se han subvencionado están la sustitución de las lámparas por otras de mayor eficacia lumínica, sobre todo si las que están puestas todavía son las de vapor de mercurio; la instalación de sistemas de regulación del nivel luminoso, dependiendo del horario, o de encendido y apagado por reloj atronómico en cabeceras de línea. También la sustitución actual en semáforos y anuncios luminosos por tecnología LED, equipada con reductor nocturno.