Un viaje a la era de los dinosaurios, a través de pilastras y columnas que sostienen monumentos, o de muros en comercios del centro. Los fósiles que permanecen en las paredes de Sevilla son los protagonistas de una nueva propuesta cultural: dos rutas por el casco histórico para redescubrir el patrimonio paleontológico y geológico. "Comenzamos por la Plaza de España, en el caso de la ruta de los monumentos, para comprobar en distintos puntos la existencia de fósiles que datan de hace 250 millones de años, el periodo conocido como Secundario, cuando vivían los dinosaurios", explica Mario Parra, ambientólogo y especialista en fósiles, mientras apunta a un balaustre donde se puede comprobar su relato, junto a la ría. "Tiene forma de caracol, pero es un ammonites, cuyo caparazón está dividido en cámaras", explica el guía, mientras una familia disfruta del paseo en barca en una mañana soleada.

El viaje en el tiempo que propone tiene otra parada a pocos pasos de la Plaza de España, en la Glorieta de San Diego. Testigos de tiempos remotos, dos columnas dejan ver ammonites y belemnites, grupos de cefalópodos extinguidos que vivían en fondos marinos. "Las conchas, el fango y los animales que reinaban hace cientos de millones de años en el fondo de mares y océanos, con el transcurso de los siglos, se petrificaron y formaron piedra caliza". Desde las canteras llegaron mucho después hasta los edificios. Los fósiles permanecen así presentes como parte del material de construcción. De esta manera, mientras la vida cotidiana sigue, una mirada pausada permite reconocer estas formas jurásicas. Mario Parra comenzó hace años a recorrer la ciudad para buscar estos restos que hablan de la historia de la Tierra. Y tras realizar un inventario, este especialista muestra y ofrece explicaciones al público general interesado en conocer esta parte del patrimonio a través de dos rutas. La iniciativa, puesta en marcha por la empresa Ecomímesis, cuenta con la colaboración del Ayuntamiento, y está dirigida al público general a través de la página web www.andaluciageologica.es. En grupos, de forma concertada o a través de itinerarios programados, los interesados pueden disfrutar de este paseo a pie o en bicicleta. "Las rutas también están adaptadas a personas discapacitadas, en silla de ruedas, o que necesitan del lenguaje de signos", apunta Daniel García, coordinador de Ecomímesis. También se han creado versiones en inglés y francés para atraer al turista extranjero.

Una de las rutas recorre monumentos como la Plaza de España, la Universidad de Sevilla y la Catedral; mientras que otro itinerario hace paradas en comercios del centro, donde también se conservan fósiles.

"El resto más antiguo está localizado en distintos puntos, en la Plaza de San Pedro o en la calle Salado, por ejemplo, donde hay esponjas, seres que vivieron hace 550 millones de años, en la Primaria", añade el especialista. Y en cuanto al lugar más curiosos donde permanecen huellas del pasado: "Los aseos del Antiquarium de la Encarnación, donde se pueden ver partes de erizos". En otros puntos, por ejemplo, en el Archivo de Indias, "se pueden observar fósiles del periodo Terciario -hace 65 millones de años- así como en la Fábrica de Tabacos. La empresa que gestiona estas rutas, Ecomímesis, tiene previsto completar estos itinerarios urbanos con salidas al campo, a la Sierra Norte, en el entorno del Cerro del Hierro, con otro proyecto similar. "La provincia cuenta con un patrimonio que permite reconstruir la historia geológica de la región, y los materiales presentes en la ciudad son de alguna manera un compendio de toda esta geodiversidad".

Mediante material didáctico, las rutas también estarán a disposición de centros docentes interesados en mostrar a los escolares la historia geológica de Andalucía a través de estos restos.