El Ayuntamiento de Sevilla tendrá que tapar un agujero de un millón de euros como consecuencia del desfase entre ingresos y gastos generados por la celebración de la final de la Copa Davis de tenis el pasado diciembre. El delegado de Economía, Empleo, Turismo y Fiestas Mayores, Gregorio Serrano, presentó ayer las cuentas como presidente de la asociación para la promoción exterior de Sevilla (Appes). Unas cuentas que no reflejan, obviamente, el impacto económico y la publicidad que un acontecimiento de esta importancia generan en beneficio de la ciudad.

El torneo supuso unos gastos de 3,7 millones de euros para las arcas municipales y unos ingresos de 2,8 millones, si bien Serrano destacó que se disponen de unos activos por valor de 380.000 euros gracias a los materiales incorporados definitivamente al patrimonio municipal, lo que, según el mismo concejal, supondría que el "déficit real" se rebajaría a algo más de medio millón de euros.

La presentación de los datos tuvo un innegable matiz político. El PP recordó insistentemente que ni la Junta de Andalucía ni la Diputación Provincial -controlada entonces y ahora por el PSOE- ayudaron económicamente a la celebración del torneo, como sí hicieron en la edición de 2004, cuando el socialista Sánchez Monteseirín gobernaba la ciudad. Serrano arremetió contra los socialistas: "No han pagado ni sus entradas". Aseguró que el Ayuntamiento esperaba hasta última hora que ayudaran de alguna forma a la celebración del torneo: "La Davis es la Davis, no una competición de caniches". Se fue a los números de la final de 2004 para establecer comparaciones: "Si la Junta hubiera puesto encima de la mesa tan sólo la mitad de lo que puso en aquella ocasión, el coste del torneo en 2011 hubiera sido de cero euros. Y si hubieran puesto la misma cantidad, se le hubiera ganado a la Davis un total de 607.000 euros. Pero se trataba de darle una bofetada a Zoido".

La comparación de ambos torneos, celebrados con siete años de diferencia, sirvió al concejal Serrano para destacar que el valor de la cubierta en 2004 fue de 930.000 euros -"Y está perdida o robada"- y en 2011 ha sido de 330.000 y está almacenada a la espera de un nuevo uso. En 2004 se captaron 750.000 euros en patrocinios privados, mientras que en 2011 se han obtenido por el mismo concepto un millón de euros.

Los gastos del torneo del pasado diciembre se precisan en diversos conceptos. En acciones de captación, candidatura del evento y canon de concesión, 1.014.400 euros (un 27% del total); en infraestructuras y equipamientos necesarios para la competición, incluyendo la instalación, montaje y desmontaje de la cubierta, 1.547.002,90 euros (41%); en logística, 302.597,82 euros (8%); en transportes y alojamientos de acuerdo con el convenio firmado con la Federación Española de Tenis, 142.193,23 euros (4%); y en acciones promocionales y de captación y retorno de patrocinadores, 136.761,59 euros (4%).

En cuanto a los ingresos, se registran un total de 2.809.957,55 euros, de los que la mayor parte procede de la venta ordinaria de abonos: 1.329.881 euros (un 47%). Los patrocinios y donaciones dinerarias, 937.838,35 euros (33%); la venta de abonos vía patrocinadores, 257.572,30 euros (9%); aportaciones y donaciones en especie, 205.965,90 euros (7%); y venta de palcos, 78.700 euros (3%). El balance entre ingresos y gastos arroja un déficit total de 965.844 euros. "Ni siquiera buscábamos beneficios", añadió el concejal popular, recordando el impacto turístico y la fortaleza de la marca Sevilla que un acontecimiento de esta repercusión supone para la ciudad. A este respecto puso el ejemplo de los tres millones de canon que pagará Granada para acoger partidos de España del Mundobásket. Pero tampoco aquí perdió la oportunidad de ahondar en la crítica política:  "Al igual que con las escuelas-taller o la Bienal, el tortazo a Zoido es en la cara de todos los sevillanos. Eso sí, allí estaban todos sentados viendo el partido", ironizó en referencia a los altos mandatarios de la Junta y la Diputación.

Serrano presumió de que las cuentas se han presentado tres meses antes de lo que lo hizo el gobierno municipal de 2004. Y confirmó que la Hacienda local trabaja en modificaciones presupuestarias para asumir el déficit. Apuntó al margen de tres millones de euros que aún queda de los once millones resultantes de diferir la devolución de la Participación de Ingresos del Estado (PIE) a diez años.