El portavoz y secretario de Ciudadanos Sevilla, Javier Millán, funcionario de 45 años, licenciado en Derecho y especializado en relaciones laborales, casado y con tres hijos, se presenta como candidato a la Alcaldía con el sueño de ser la tercera fuerza para cambiar el rumbo económico y político de la ciudad y trabajar por el interés general. "Los sevillanos han tenido infinita paciencia con los sucesivos gobiernos municipales: antes por el despilfarro y ahora por una política antisocial de inacción y estancamiento. El caso de las setas de la Encarnación refleja esas etapas", afirma en una entrevista con este periódico.

Asegura que el partido conoce las fortalezas y debilidades de la ciudad tras haber hecho encuestas en la calle y estar al día de los informes públicos."En esta ciudad ha habido mucha opacidad y se ha practicado el capitalismo de amiguetes.Queremos promover la igualdad de oportunidades para lograr empleo, para facilitar constitución de empresas, para contratar con la administración pública...".

Su compromiso es trabajar en varias claves: reducir al máximo los cargos de de libre designación y asesores, que el Ayuntamiento lidere la promoción del empleo, de los emprendedores, y del comercio minorista y, sobre todo, que Sevilla dé el salto a la innovación. "La principal industria de Sevilla es el turismo, pero nos negamos a que Sevilla sea la ciudad de los veladores, tiene que ser mucho más y para eso tenemos que crear una sinergia entre la empresa y la universidad".Ser ejemplar en la gestión es el objetivo. "Los ciudadanos son los jefes de los políticos y vamos a implantar el principio de rendición de cuentas. Ser ejemplares en la gestión del dinero público y total transparencia en las contrataciones, la agenda, y sobre todo el presupuesto municipal tiene que estar a un clic del conocimiento ciudadano". Otra clave es la rebaja fiscal.

Defiende que sábe qué necesitan los emprendedores y empresas porque conoce perfectamente los problemas por su perfíl de experto en relaciones y conflictos laborales. Y añade que en su lista la inmensa mayoría proceden del sector privado: desde la investigación, a ciencias políticas, jurídicas, economista sin pasado político no conocidos por el gran público pero competentes y con ilusión.

Lo primero será derogar la ampliación de la zona azul y empezar de cero dialogando con los colectivos afectados y "tras estudios previos en el marco de una estrategia de movilidad que priorice el transporte público, el carril bici y los barrios con muy deficitaria conexión con el centro".

De la Semana Santa y la Feria cree que hay aspectos mejorables en seguridad y movilidad. De la sentencia de las setas, opina que se ha cometido "una falta de diligencia apabullante y seguro que el diálogo será mejor que un pleito más costoso para los ciudadanos". "Este sobrecoste del sobrecoste se tiene que acabar. Esta situación donde los millones se van por el sumidero y los ciudadanos están achicharrados a impuestos y a zona azul se tiene que acabar".