Uno de los indicadores del coste de la vida en Sevilla no registrará aumento alguno en 2016. Las tarifas de los autobuses urbanos quedan congeladas. Así lo decidió este martes el consejo de administración de esta sociedad de capital municipal cien por cien. Tussam mantendrá los precios por segundo año consecutivo, después de la última subida registrada en 2013. Los números de la empresa revelan un equilibrio en sus conceptos más relevantes: ingresos por venta de títulos de viaje, número de viajeros, velocidad comercial y kilómetros realizados.

La sociedad considera que es el momento de hacer un esfuerzo para que los sevillanos puedan seguir disponiendo de un transporte público a un precio competitivo. Se pretende primar así el uso de los títulos más demandados, como el bonobús sin transbordo (0,69 euros por viaje) y con transbordo (0,76 euros por viaje), sin olvidar tampoco la tarjeta mensual, la correspondiente a la comunidad universitaria y la de la tercera edad, que conservará su carácter gratuito.

El delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores y vicepresidente de Tussam, el socialista Juan Carlos Cabrera, destaca el esfuerzo que se realiza con esa congelación de las tarifas, una decisión que se acompañará del fomento y la mejora del transporte público de la ciudad de Sevilla: "Es una de las prioridades de este gobierno municipal".

Sevilla continuará teniendo una de las tarifas más bajas del sector del transporte urbano en España, según siempre fuenets municipales. Durante 2015 los precios de los títulos de viaje más demandados de Tussam -tarjetas multiviajes y univiaje- han estado por debajo de los relativos a otras ciudades. Con la intención de continuar con su política de ofrecer un mejor servicio, Tussam incorpora para el curso 2015-2016 algunas ventajas en las condiciones de uso de la tarjeta universitaria. Con el objetivo de dar una mayor facilidad a los clientes a la hora de acceder a este título -que permite realizar un número ilimitado de viajes durante el periodo comprendido de octubre a junio-, se ha incorporado la posibilidad de optar por el fraccionamiento del pago en dos plazos.

También se ha aprobado recientemente, de forma experimental, la puesta en marcha de la tarjeta nominativa universitaria trimestral con validez del 1 de octubre al 31 de diciembre de 2015, sin límite de viajes, al precio de 78 euros.

De enero a agosto de 2015, los autobuses de Tussam han realizado 857.828 vueltas con algo más de 12 millones de kilómetros recorridos. La velocidad comercial se ha situado en estos primeros ocho meses del año en 12,99 kilómetros por hora, un registro que coincide con el del año anterior. La velocidad comercial ha mejorado levemente en el último lustro como consecuencia de la puesta en funcionamiento de determinadas medidas como los sentidos únicos, la doble canceladora o la prioridad semafórica en varios puntos de la red de líneas de Tussam. Aun así la velocidad adecuada sería más bien próxima a los 15 kilómetros a la hora, motivo por el cual los técnicos de Tussam han reiterado en otras ocasiones la necesidad de adoptar medidas que favorezcan el transporte público frente al vehículo privado, con intervenciones directamente encaminadas a mejorar la velocidad comercial.

Respecto al uso de los distintos títulos de viaje, el más utilizado de enero a agosto ha sido el bonobús sin transbordo, con el 23,4%, una cifra ligeramente inferior a la del pasado año. A continuación figura la tarjeta de la tercera edad, con el 20,7% y el bonobús con transbordo, con el 20,5%. El billete univiaje fue utilizado por un 9,6%; el bonobús solidario, un 9,4%, un 17,4% más que el año pasado; la tarjeta del consorcio un 6,9%, el abono mensual un 6,2% y la tarjeta joven, un 2,9%.

El anterior alcalde, Juan Ignacio Zoido, puso especial empeño en garantizarse la la paz social en Tussam y Lipasam, las dos empresas que tradicionalmente lastran los presupuestos, necesitadas siempre de transferencias municipales para soportar los gastos. La Hacienda local de Zoido dedicó la mayoría de sus recursos a poner a cero el contador de su deuda. Tussam pasó de deber 53,5 millones en enero de 2012 a 16,4 millones en junio de 2015, y Lipasam, de 18,3 millones a 6,1 millones ahora. Además de estas dos sociedades municipales, existe un organismo autónomo que también tiene el efecto de agujero negro económico: la Gerencia de Urbanismo.