Sevilla

Campaña contra las personas que fomentan con alimento la "plaga" de palomas

  • Vecinos de El Fontanal han colocado carteles y pancartas en domicilios para que se erradique la plaga prohibiendo alimentarlas de forma artificial.

Un sector de vecinos de la barriada sevillana de El Fontanal ha iniciado una campaña de protesta con carteles y pancartas en domicilios contra la existencia de determinadas personas que contribuyen a fomentar lo que consideran una "plaga" de palomas al alimentarlas en la vía pública, con la inacción de la administración pública.

Según ha explicado el portavoz vecinal Antonio González Barrera, son ya varios los balcones particulares que lucen cartelería en el núcleo comprendido entre las calles Arroyo, Samaniego y Francisco de Ariño, con consignas tales como Tengo derecho a usar mi terraza, Quejas desde 2005 al Ayuntamiento o Ley de aves plagas ya.

"Se trata de hacer visible la protesta contra la gente que le da de comer y la autoridad que lo consiente, y poner de manifiesto que los escritos al Ayuntamiento no nos han servido", ha indicado González Barrera, que ha atribuido la responsabilidad no sólo al Consistorio, sino también a las autoridades de Medio Ambiente y Salud Pública del Estado y de la Junta de Andalucía.

Y es que, para el portavoz vecinal, la nueva ordenanza anunciada por el Ayuntamiento no supondrá solución para aquellas personas que se ven afectadas por estos animales -en El Fontanal llevan años denunciando este conflicto-, pues "el mensaje es que se autoriza a los amantes de las palomas a darle toda la comida que quieran siempre que se la echen en un parque".     

Según ha añadido, "los técnicos del Laboratorio Municipal tienen claro que la prohibición debe ser clara y definitiva, pues es necesaria para controlar a las palomas". 

Y es que estos vecinos -que apuntan a algunos lugares donde se alimenta a estos animales, como la plaza del Pianista José Romero- proponen la captura definitiva y la erradicación de la plaga prohibiendo alimentarlas de forma artificial, mientras que el Consistorio "o bien pasa de los perjuicios para algunos vecinos o bien los intenta atenuar con capturas periódicas que suponen un gasto extra que se podría evitar erradicando las palomas de una zona más que castigada". 

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