Todo en la obra de Alicia López es puro mensaje. Desde su portada color violeta, "que significa transformación", e ilustrada por la propia autora con un terremoto, "situación que vive en la vida real y en el interior su protagonista", hasta la propia historia. ¿Cómo empezar? Hay un camino interior... es "una manera de ayudar a los demás, un legado donde muchas mujeres se han visto ya reflejadas. Una esperanza para ellas". Y es que lo que en estas páginas se narra es la vida de una mujer que sufre malos tratos por su pareja. Dentro de la ficción de la obra se crea un hilo conductor que lleva hacia este "camino interior" que hace libre a su protagonista. La novela, editada por Círculo Rojo, se desarrolla en dos planos: el real y el astral. Este último necesario para encontrar ese sendero que lleva al "autodescubrimiento o autoconocimiento, al perdón y al sacar al guerrero que finalmente abre la jaula". En una primera parte de la novela la protagonista sin autoestima, ni libertad se pregunta el quién soy. Al momento revelador le sigue una segunda parte donde descubre cuántas mujeres hay en su interior y qué tiene de aquellas figuras de la mitología que fueron rechazadas por ser mujeres. Sólo dos meses le llevó a la autora escribir esta obra. Ahora, ya plantea una segunda parte de la misma y espera la publicación de otra novela ya acabada. Dice sentirse en un momento creativo, y así lo demuestran las ilustraciones que ella misma ha realizado para su obra.