'Cookies' de chocolate para engalanarse

Con un préstamo de 50 euros para telas. Así comenzaron a trabajar Pablo Acosta y su compañera Betty López, los promotores del taller Sweet Tweet (antes conocido como Reciclarte). La idea surgió en un avión con destino a Roma, donde ambos amigos conocieron a una diseñadora de Barcelona y les metió el gusanillo en el cuerpo. Desde entonces, Pablo y Betty crean collares, broches, diademas, pendientes y agendas, entre otros productos, con un toque bastante original y alternativo. "Nuestro nombre original, Reciclarte, se debe a los materiales que utilizábamos, todos reciclables: chapas, tapones, botones, coches de juguetes, sacapuntas, muñecos de Playmobil", comenta Pablo Acosta, de 22 años, y actor de profesión. "Hemos creado una nueva línea más romántica y chic que la anterior, más popera, y no nos parecía ético seguir con el mismo nombre, ya que no todo nuestro material es reciclado". En la nueva colección de Sweet Tweet hay pasteles, galletas de chocolate, sándwiches de nata, moras y hasta galletas Oreo, pero nada comestible, es pura bisutería. "Fabricando las piezas dan ganas de comérselas porque parece bizcocho y nata de verdad". Tanto Pablo como Betty reconocen que su afición por lo handmade no les da de comer pero "sí para los caprichos relacionados con el ocio". Betty y Pablo tienen el taller en Gines, pero sus productos también se veden on line a través de su blog lafactoriasweet.blogspot.com.