El Grupo Cementos Portland Valderrivas ha asegurado en un comunicado que su planta de Alcalá de Guadaíra cumple "con los controles y autocontroles" previstos en la Autorización Ambiental Integrada con la que cuenta, cumpliendo la ley vigente en cuanto a la cantidad de emisiones permitidas.

Responde así a las denuncias que colectivos ecologistas han hecho sobre las supuestas emisiones de la fábrica. "El grupo gracias a su política de transparencia, ofrece a cualquier persona o instituciónque lo solicite, visitar la fábrica y conocer sus instalaciones", ha recordado, a la vez que ha subrayado que no realiza dentro de su actividad ninguna valorización de ningún tipo de residuo.

"Recordamos que los límites legales, controles y técnicas utilizadas en la fabricación de cemento, establecidas en la Autorización Ambiental Integrada, son aprobadas por la normativa autonómica, nacional y europea, y recogidos en el documento de Mejores Técnicas Disponibles para el sector cementero, aprobados por la Comisión Europea, con límites similares para todas las Fábricas de cemento de la Unión Europea".

También ha recordado que su actividad "contribuye al desarrollo socio-económico" de la comarca de los Alcores, con 200 empleos directos y mas de 500 empleos indirectos y casi dos millones de euros en impuestos locales, autonómicos y estatales.

La asociación Alwadi-Ira, integrada en Ecologistas en Acción y en la plataforma contraria a la incineración de derivados de residuos no peligrosos, ha asegurado que se han interpuesto varias denuncias ante Seprona de la Guardia Civil por supuestos "episodios de contaminación" en la cementera en los últimos meses.