El Parlamento andaluz aprobó este miércoles la tramitación de los dos proyectos de ley que reconocen las universidades privadas CEU Fernando III y Tecnológica Atlántico-Mediterráneo (Utamed), que cuentan "con todas las garantías jurídicas", según la Junta.

El consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, defendió en el Pleno que el marco normativo vigente establece que la implantación de estas instituciones debe realizarse por ley y con el respaldo del Parlamento, donde supera el debate a la totalidad tras rechazarse, en la votación al final de la jornada, las enmiendas de PSOE y Por Andalucía.

"Andalucía aborda la creación de universidades privadas mediante leyes propias y con total transparencia y no a través de una disposición adicional, como ya se hizo anteriormente con la única institución privada que hasta la fecha existe en la región", afirmó el consejero en referencia a la Universidad Loyola.

Tras las críticas de los rectores andaluces, que consideran que los proyectos no cumplen con los requisitos establecidos, Villamandos repasó el procedimiento seguido durante tres años, en el que se han recabado los informes del gabinete jurídico de la Junta y del Consejo Económico y Social y el Consejo Consultivo, en los que "no se incluye objeción alguna" a dichos textos.

Villamandos subrayó que en ese proceso los promotores de los proyectos han ido mejorando las propuestas iniciales y asumiendo las recomendaciones planteadas tanto por el Consejo General de Política Universitaria como por la hoy extinta Dirección de Evaluación y Acreditación (DEVA).

El consejero aseguró que la Junta "estará muy vigilante para que en todo momento se cumplan los estándares de calidad con los mismos parámetros que se aplican al conjunto del sistema universitario andaluz".

"Ningún título se aprobará en Andalucía si no cumple los requisitos de calidad exigidos, provengan de donde provengan las solicitudes", enfatizó Villamandos, para quien ambas propuestas "vendrán a complementar la actual oferta formativa", con diez instituciones públicas y una privada.

Villamandos resaltó que la Junta ha impuesto tres exigencias "básicas" en las normativas que regulan ambas universidades, empezando por atribuir una valoración preferente a los resultados académicos entre los distintos méritos que aleguen los aspirantes y desarrollando una labor de I+D "notable", ya que "el papel de las universidades es docente, pero también investigador".

Críticas de la oposición

El portavoz del PSOE Antonio Ruiz advirtió a Villamandos de que "su reputación como defensor de la excelencia en la Universidad quedará en entredicho" si estos proyectos salen adelante y afirmó que "no se puede pasar una vida predicando eso y ahora traer el Parlamento dos universidades de escasa calidad".

"Tiene una actitud y laxitud vergonzosa", criticó Ruiz, quien sostuvo que ninguno de los dos proyectos cumple con la Ley de Universidades y que su aprobación supondrá "el pistoletazo de salida del modelo Wert y Ayuso en Andalucía", en el que se promociona las universidades privadas "bajando los estándares de calidad" y primando "el mercadeo de títulos".

Esperanza Gómez, de Por Andalucía, defendió su enmienda a la totalidad del texto basándose "no solo en razones políticas sino en argumentos jurídicos" ya que, a su juicio, ninguno de los dos proyectos "cumplen los requisitos más mínimos y obvios", por lo que se ha preguntado "qué se gana incumpliendo la norma estatal".

"Establece criterios de calidad que también nos merecemos", reprochó al consejero, a quien argumentó que esta tramitación es "la historia de un despropósito", con una universidad pública "abandonada a su suerte" olvidando que se trata del "único ascensor social que funciona".

Por parte de Vox, Alejandro Hernández acusó a ambos grupos de izquierdas de "encubrir un debate profundamente ideológico" y les reprochó que fomenten "la idea de que la existencia de lo privado ataca a lo público", cuando que se obligue a "competir" a las universidades públicas "es bueno para el sistema".

David Castilla, del PP, sostuvo que su grupo no está en contra de la universidad privada "aún defendiendo la pública del principio al final" y ha opinado que estos proyectos suponen "un enriquecimiento", además de criticar que el PSOE "se oponga por oponerse" y lamentar que las enmiendas se hayan hecho "todas con un corta y pega"